Hwang In-ho y Seong Gi-hun están en relación de hace 3 años, ambos se aman mutuamente y pronto tendrán su primer retoño que podría costarle la vida al Omega.
Inicio: 20/01/2025
Final 3/04/2025
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Habían pasado tres meses desde que el Omega y el Alfa comenzaron a prepararse para la llegada de su bebé. Gi-hun estaba ahora en su quinto mes de embarazo, y su pancita ya era lo suficientemente notoria como para ser vista con facilidad. El Omega se sentía afortunado, ya que durante estos meses no había experimentado ningún malestar significativo. Atribuía su buena suerte a ser un Omega afortunado, creyendo que tendría un embarazo feliz y sin complicaciones.
Era una mañana tranquila en la mansión. El Alfa estaba en su oficina, sumergido en su trabajo, mientras el Omega lo acompañaba, disfrutando de sus antojos. Había algo reconfortante en estar juntos, incluso en medio de las tareas diarias. Gi-hun había preparado una bandeja con frutas frescas, galletas y un vaso de jugo, y se la llevó a la oficina del Alfa.
────── Buenos días - Saludó el Omega con una sonrisa, entrando en la oficina con la bandeja. - Pensé que te gustaría algo de compañía y un poco de alimento.
El Alfa levantó la vista de sus documentos y sonrió al ver a su Omega. ────── Buenos días, amor. Gracias, eso se ve delicioso. - Se levantó de su silla y rodeó el escritorio para besar suavemente la mejilla del Omega. - ¿Cómo te sientes hoy?
────── Me siento bien, realmente feliz - respondió el Omega mientras se sentaba en un sofa cercano. - No he tenido ningún malestar significativo, y creo que nuestro bebé está creciendo fuerte y saludable.
In-ho se sentó a su lado, tomando una fresa de la bandeja y ofreciéndosela a la boca del Omega. ────── Eso es maravilloso, amor. Me alegra saber que estás bien. Y yo haré todo lo posible para que sigas así.
Mientras comían y charlaban, Gi-hun no pudo evitar tocar su vientre con ternura. Cada día que pasaba, se sentía más conectado con el bebé que crecía dentro de él. ────── ¿Sabes? A veces me pregunto si será niña o niño. Pero al final, lo que más importa es que sea feliz y saludable.
────── Sí, estoy de acuerdo - dijo el Alfa, acariciando suavemente el vientre del Omega. - Sea lo que sea, vamos a darle todo nuestro amor y cariño.
Después de un rato, el Alfa volvió a su trabajo, pero el menor se quedó en la oficina, disfrutando de la tranquilidad y la compañía. A medida que la mañana avanzaba, el Omega empezó a sentir un antojo particular de helado de vainilla con miel. Se levantó y se dirigió a la cocina, donde rápidamente preparó su antojo.
De regreso en la oficina, se acomodó nuevamente en el sofa, disfrutando de su helado. ────── Este embarazo me está haciendo descubrir antojos que nunca pensé que tendría - dijo con una risa.
El mayor sonrió, observando con amor al Omega. ────── Eso es normal, cachorrito. Te vez tan tierno.
In-ho terminaba su oficios para darle la atención a su esposo, ese día tenían consulta con el Doctor, sería un día especial para ambos, ya que le dirían el género del bebé.