^^Inocente x Desconocido ^^ [ Sonadow ] T2

• Desconocido •

—Te traje aquí hace unos meses. Dijiste que era uno de tus lugares favoritos. Solías venir para despejarte, pensar o simplemente disfrutar de la vista.

Sonic lo observó en silencio mientras Shadow daba una calada al cigarro. Había algo en esa escena que le resultaba extrañamente familiar, como si hubiera estado en ese mismo lugar, con esa misma persona, antes.

De repente, Shadow apagó el cigarro en una pequeña caja metálica y caminó hacia Sonic.

—Ven aquí.

Antes de que Sonic pudiera responder, Shadow lo tomó suavemente por la cintura y lo levantó con facilidad, colocándolo sobre la tapa del auto.

—¿Qué haces? —preguntó Sonic, su voz temblando ligeramente mientras su rostro se encendía en un rubor intenso.

Shadow lo miró con una sonrisa que mezclaba diversión y afecto.

—Te estás poniendo rojo como un tomate, Sonic. ¿Qué pasa?

—¡Nada! —respondió Sonic, desviando la mirada, pero el rubor no hizo más que intensificarse.

Shadow rió por lo bajo, inclinándose hacia él. Su aliento era cálido contra el cuello de Sonic cuando dijo:

—¿Te acuerdas de esto?

Sin previo aviso, Shadow mordió suavemente el cuello de Sonic, justo en el mismo lugar donde solía hacerlo en el pasado. Sonic jadeó, sorprendido, mientras una oleada de sensaciones lo invadía. No sabía por qué, pero ese gesto, ese toque, se sentía tan familiar que casi dolía.

Cerró los ojos por un momento y las imágenes comenzaron a fluir en su mente: recuerdos fragmentados de ellos dos juntos, riendo, discutiendo, compartiendo momentos como ese. Cuando volvió a abrir los ojos, miró a Shadow, su expresión era un torbellino de emociones.

—Shadow... Esto...

Shadow se quedó quieto, observándolo con una intensidad que parecía atravesarlo.

—¿Recordaste algo?

Sonic asintió lentamente, llevando una mano al lugar donde Shadow lo había mordido.

—Sí. No sé cómo explicarlo, pero... siento que ya hemos estado aquí antes. Que tú... siempre has estado conmigo.

Shadow sonrió, una expresión rara vez vista, y se inclinó aún más cerca hasta que sus frentes se tocaron.

—Siempre he estado contigo, Sonic. Nunca me fui, incluso cuando no podías recordarme.

Sonic tragó saliva, sus emociones estaban a flor de piel. El nudo en su pecho se aflojó un poco mientras dejaba que esa conexión familiar y reconfortante lo envolviera.

—Gracias, Shadow.

La ciudad seguía brillando bajo ellos, pero en ese momento, todo lo que importaba era lo que había entre ellos: una chispa de algo que el tiempo y los obstáculos nunca habían podido apagar.

Después de la cena, las despedidas fueron cálidas y llenas de promesas de reunirse nuevamente. Sonic salió del restaurante junto a Shadow, quien lo guió hasta un elegante auto negro estacionado cerca.

—¿Siempre tuviste un gusto tan refinado? —preguntó Sonic con una sonrisa, observando el vehículo.

—Siempre he tenido un gusto impecable —respondió Shadow, abriendo la puerta para que Sonic subiera.

El viaje transcurrió en silencio, pero no era incómodo. Sonic miraba por la ventana, viendo las luces de la ciudad pasar como destellos. Shadow conducía con calma, como si estuviera tomándose su tiempo para disfrutar del momento. Finalmente, llegaron a un mirador apartado que ofrecía una vista espectacular de la ciudad iluminada.