thirty (end).

1.1K 174 153
                                    

Narrado Por Luke Hemmings:

-¡Papá!- gritó Christina en los asientos de atrás.

-¿Si princesa?- le pregunté de la mejor manera.

-¿Porqué siento que vamos al orfanato?- habló asustada.

Mire rápidamente a Michael, tratando de buscarle algún tipo de respuesta, y él solo me miró preocupado.

-Pequeña, lo que menos vamos a hacer es ir al orfanato- mire hacía atrás y le sonreí tratando de buscar su confianza, la cual conseguí cuando su sonrisa se amplió.

-Esta bien.

No me gusta mentirle al pequeño amor de mi vida.

Y por lo que sé, a Michael tampoco.
Su cara lo demuestra todo, su labios estan completamente cerrados, haciéndome pensar que casi no respira, sus ojos, que aunque sé que están centrados en la carretera, no lo están del todo, tienen una ligera capa de lágrimas que en cualquier momento derramará.

No estamos del todo bien.

Después de estar los tres completamente callados por cinco minutos, un fuerte golpe nos alarmó a todos, logrando que Michael perdiera completamente el control del auto.

-¡Mierda la rueda trasera!- gritó Michael tratando de conseguir nuevamente el control.

Rápidamente mire hacía atrás y vi a Christina sin el cinturón puesto y mirando para atrás.

-¡CHRISTINA PONTE EL CINTURÓN AHORA MISMO!- le grité.

-¡Papá hay un auto azul atrás que nos esta persiguiendo!- gritó ella por primera vez, sin hacerme caso aún.

-¡Ponte el cinturón!- le grité nuevamente.

Y lo hizo.

-Mierda Michael trata de que no nos alcancen- le susurré lo mas preocupado posible.

-Robert eso es lo que estoy ha...

Y no término porque nuevamente el ruido de una bala impactó al auto.

-¡Por la mierda Luke no puedo y más!- gritó Michael descontrolándose.

Me di vuelta para ver como estaba Christina y vi como lloraba.

-Pequeña todo esta bien ¿Ya?- miré sus ojitos verdes llorosos y se me rompió el corazón.

Me quité el cinturón y me fui hacía atrás, en donde estaba Christina, y la abracé con todas mis fuerzas.

El auto frenó bruscamente, logrando que me golpeara con el asiento del copiloto. -Luke el auto ya no funciona- me miró Michael, casi llorando.

-Mike, dejalo, así esta bien.

Michael salió del auto y vimos cómo el auto que nos había perseguido todo el puto recorrido se estacionaba a metros de él.

-Quiero salir- susurró Christina.

-Bebé, no, te puede ocurrir algo y eso es lo que menos quiero en la vida- la miré.

-¿Pero papá Mike?

-A papá Mike no le va a ocurrir nada.

Del auto azul salió un hombre con aspecto cansado, triste, enojado, ojos de un completo drogadicto, asquerosamente alto, me pasaba como por quince centímetros, y era rubio de ojos verdes, como Christina.

The adventures of the daughter of muke (m.c)जहाँ कहानियाँ रहती हैं। अभी खोजें