Sí, de alguna forma, había cortado con Yeonjun sin siquiera decírselo. Y dolía como la mierda.
Gracias a todos los dioses, finalmente era viernes y Beomgyu pasaría un hermoso fin de semana sin tener al estúpido de Kai encima, volviéndolo loco, y se sentía realmente aliviado por eso. Apreciaba mucho todo lo que Kai estaba haciendo por él, pero de a ratos se sentía asfixiado por tanto que hacía, y no era de ayuda que quisiera obligarlo a salir con alguien más porque Beomgyu no podía olvidarse de Yeonjun por arte de magia y en tan poco tiempo. Pero ya era viernes y por unos días Kai no importaba, con eso podía sentirse satisfecho. En la privacidad de su casa podía permitirse sufrir un poquito por Yeonjun así que aprovecharía ese fin de semana para leer sus conversaciones viejas con el pelinegro -que había salvado milagrosamente de las garras de Kai-, mirar esas películas románticas que sólo con un corazón roto podría soportar, comería helado y escucharía todas las canciones de amor que pudiera encontrar. Claro que ninguna hablaba sobre estar enamorado del novio de su hermana mayor, pero podía imaginar que existía alguna así.
Y se masturbaría con las fotos de Yeonjun, claro. Con un poco de suerte podría imaginar que todavía no había sucedido nada con el pelinegro y que estaba volviendo el tiempo a esos días en los que sólo lo tenía en su mente cuando se tocaba pensando en él, y con un poco más de suerte tal vez se enfermaría y Yeonjun aparecería para cuidarlo y... no, nada de eso pasaría. Pero podía imaginarlo, porque Kai podría haberle quitado todas las oportunidades de ver a Yeonjun por el momento, pero los recuerdos no podía quitárselos, y Beomgyu los atesoraría hasta gastarlos. Estaba dispuesto a encerrarse en el baño para desahogarse con alguno de esos recuerdos cuando pasó por la habitación de Chaewon y, como la puerta estaba abierta, no pudo evitar escucharla mantener una conversación por teléfono (era eso o hablaba sola, y Beomgyu sabía que su hermana no estaba loca).
—Pero prometiste que saldríamos hoy, Hyunnie —se quejaba Chaewon, sonaba decepcionada—. No te he visto más que para comer el martes, ¿estás enojado conmigo?
Beomgyu tragó saliva. Hyunnie y comer el martes sonaba demasiado a Yeonjun.
—Es sólo que has estado actuando muy raro toda esta semana, más distante de lo normal —seguía reclamando la chica—. Sé que no eres cariñoso pero hasta para ti, esto es demasiada distancia... ¿hay algo que te tenga mal? ¿Le pasó algo a tu abuela, acaso? Puedes contármelo... por favor. Yeonjun, soy tu novia, puedes contarle lo que sea a noona, ¿por qué no confías en mí? —Chaewon sonaba a punto de llorar. Beomgyu se sorprendió al comprobar que a él tampoco le faltaba mucho para hacerlo—. ¿Cómo dices? ¿Una pelea? ¿Por eso me evitabas? ¡Yeonjun, tú, mocoso tonto! ¿Cómo que te has metido en una pelea?
¿Qué?
—No puedo creer que te hayas metido en una pelea, Yeonjun —soltaba, ahora molesta, Chaewon—. ¡Sí que importa! ¿Cómo ha pasado eso siquiera, dónde estabas, qué hiciste para terminar peleando? ¡Eres peor que un niño, ni siquiera Beomgyu se mete en esa clase de problemas! —continuaba con la reprimenda ella, aunque se notaba la preocupación en cada palabra—. Ay, cariño... ¿te hicieron mucho daño?
¿Hicieron? ¿Peleó con más de uno?
—Ay... está bien, no, no estoy enojada, aunque me molesta que me hayas ocultado algo así pero no te preocupes por la cita, ya no tiene importancia —lo consoló Chaewon, entre suspiros—. Eres un tonto, Choi Yeonjun... Sí, está bien, te dejaré descansar ahora. Mejórate, ¿quieres que vaya a verte mañana? No, tienes razón, necesitas descansar, olvídalo. Cuídate, ¿ok? Te quiero. Adiós.
Beomgyu escuchó a la perfección el suspiro frustrado que soltó su hermana al colgar la llamada. Y en ese momento pensó que bien podían irse a la mierda Kai, Taehyun, sus sentimientos, su enojo, el despecho y absolutamente todo, porque no podía simplemente ignorar lo que acababa de escuchar. Yeonjun acababa de meterse en una pelea, y estaba lastimado, y lo único que quería Beomgyu en ese momento era saber qué había pasado y correr a buscar a Yeonjun y pedirle perdón y curarle las heridas y cuidarlo y besarlo y... y muchas cosas, demasiadas, pero empezaría por la más fácil.
ESTÁS LEYENDO
Don't tell nonna - yeongyu
Fanfictionno le digas a noona lo que haces con su novio, Beomgyu. comportamientos tóxicos!¡ Este fanfic es una adaptación, todos los créditos son para su respectivo autor. © Pralim_ ya la hice en narusasu toca en mi otra otp 😜
