Situación: Mattheo y tu nunca se llevaron bien. Él te hacía bromas pesadas y tú se las devolvías. Hasta que un día entre él y tú pasa algo más.
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Estaba corriendo hacía la biblioteca, esperaba que ahí él no me encontrara, ya que nunca ponía un pié ahí.
La razón de porqué estaba corriendo era fácil y sencilla: Mattheo.
Había entrado a mi habitación y robó uno de mis libros y lo había roto. Y decidí devolversela.
Entré a su habitación y le robé una de sus camisetas, y no, no es cualquiera camiseta, es su camiseta de la suerte, la usa cuando tiene un partido de Quidditch y adivinen quienes juegan hoy, exacto, los Slytherin contra Hufflepuff.
Estaba tan concentrada pensando sobre Mattheo que no me di cuenta que alguien estaba parado frente a mí.
—Oh, lo sien...-. vi que la persona con la que choque se trataba de Ginny-. ¡Ginny! amiga mía, mira lo que le robé a mattheo.
—A ver, miro.
Procedí a sacar una camiseta de mi mochila Gucci, dato muy interesante por cierto.
—Wow -. que se le note el sarcasmo a mi querida weasly-. una camiseta.
di un suspiro pesado-Sí, pero no cualquier camiseta, es SU camiseta de la suerte.
Vi como su rostro inexpresivo y aburrido se convirtió en uno de sorpresa.
—¿De la suerte? por Merlín, te va a matar ______, lo sabes.
Tenía razón, pero la vida es mejor cuando hay peligro.
—Da igual, mira como me queda.
Me saqué mi suéter para ponerme su camiseta encima de la camisa del uniforme. No me quedaba nada mal.
—¿Me queda bien o no? es cómoda. Qué tonto es Riddle en dejar su puerta abierta, o sea, a quien se le ocurre.
A todo esto, no me di cuenta que Ginny no estaba hablando, así que me detuve y vi que tenia los ojos bien abiertos, la miré confundida y ella me señaló atras mío. Solo un móvimiento de boca que decía 'Atras tuyo' .
Me di vuelta y veo a Mattheo viéndome fijamente de brazos cruzados.
—Tienes algo que me pertenece y lo quiero de vuelta.
Me quedé paralizada. Se suponía que no debía encontrarme. ¿cómo lo hizo? maldito riddle.
Suspiré y volví mi vista hacia él, mirandolo seriamente.
—Oh, ¿en serio? no sabía que era tuyo, supongo que tendré que devolvertelo. Que pena, realmente me gustaba tu camiseta-. lo miré con falsa pena, la cuál él notó.