Donde El Mito Se Convierte En Leyenda

El mar rojo

Sigo sintiéndome culpable pero, al final de cuentas la culpa fue suya ¡Has tomado todo de mí!

¿Qué es este extraño lugar? Porque no recuerdo nada de él quizá este no sea mi sueño y estoy llegando a algo aún más desconocido, no puedo evitar sentir ese temor al adentrarme más en este lugar. Algo salió mal, este no es mi sueño ¡Es el sueño de ella! Estoy condenado a jamás salir de aquí, comienzo a entender todo esto; No pude resistirme a sus encantadores ojos, me había cegado la maldad y el incesante deseo de querer matarla que no me di cuenta, todo esto fue una trampa en la que había cedido completamente.

Al poco tiempo me encontré de frente con un mar, el mar es rojo ¿Qué es eso que se desborda de él? Se siente un miedo y una tensión indescriptible. Ese mar no era normal, era un mar de sufrimiento, de dolor ¿Es sangre lo que se desborda de él? No puedo creer lo magnifico que es este paisaje.

Del otro lado se encontraba un bosque, sabía que debía dirigirme hacia allá.

Tome aire y comencé a nadar, no era difícil atravesarlo ya que pareciera que no fuera tan hondo el fondo así que tome el valor suficiente para atravesar todo ese sufrimiento, he vivido siete años en completo dolor y aun así crees que algo como esto me va a detener, seguí avanzando con toda la furia que había en mi sin voltear la mirada. A mitad de camino me sujete de algo ya que mis brazos estaban muy cansado, descanse un momento para después seguir hacia el bosque y continuar con mi venganza.

-¿Estás cansado? Se escuchó una voz.

-¿Quién eres? Pregunte.

-Soy al parecer tu único guía y por cierto mira de lo que te estas sujetando.

Mi mirada bajo y observe un cuerpo, un cuerpo muerto flotando en aquel mar de dolor.

-¡Es mejor que te apures! Exclamo aquella voz.

Cientos de cuerpos había en ese lugar, sin pensarlo tome una bocanada de aire y comencé a atravesar lo más rápido que podía el mar de sangre, cada vez parece más lejos aquel bosque no sé qué sea pero aún así debo de llegar a él. Casi llegando al borde perdí todas mis fuerzas, sabía que ya nada podía hacer.

Un viento soplo empujándome hacia la orilla del bosque, era mi salvación. Al final de cuentas la culpa ha sido mía, pero nada va a impedir que cumpla mi venganza hacia mi amada.

*Oh caballero de armadura brillante, puedes volver tus sueños realidad*

Un hermoso canto cubrió el tan frio y oscuro ambiente de aquel bosque ¿Caballero? No creo que hablen de mí, mi objetivo no es digno de uno.

-¿No lo es?

Se escuchó nuevamente esa voz; Aquel canto fue el que te ayudo a pasar, lo que te salvo la vida puedes pensar que esto solo es venganza, aunque ellos piensan algo distinto de ti. Hubieras muerto en aquel lugar.

-¿Quién eres? Le pregunte a la extraña sombra.

-Mi existencia no importa, lo único importante es guiarte a buscar tu descanso.

-¿Hablas de vengarme de ella?

-Si así lo llamas tú. Dijo en un tono muy serio

-¿Qué era ese mar, porque tantos cuerpos y tanto dolor?

Señalo con el dedo y me dijo.

Mira aquellos cuerpos sin vida impulsado por las aguas de ese mar, ellos son sueños. Este es el mar de los sueños rotos lugar de aquellas esperanzas destrozadas o despojadas de sus dueños vitales, aquí es donde se desechan todos aquellos que han dejado de soñar condenados por la sangre vertida de las personas más devastadas del mundo real.

-¿Mundo real? ¡Te refieres a que estoy muerto!

-No. Este es un mundo de sueños, pesadillas, torturas. Es como tú lo quieras ver.

Mire las enormes coníferas de aquel oscuro bosque y comencé a adentrarme a él.

-No dejes ninguna esperanza tirada, a donde vamos necesitaras mucha para sobrevivir.

Desapareció la sombra al decirme esto y yo camine directo al bosque ¡Has tomado todo de mí! Esta es una hermosa velada ahogándome en arrepentimiento.

Al final la culpa es tuya, mi amor...