En las sombras de la noche, donde la oscuridad se entrelaza con la elegancia, reside Líam, el vampiro de mil años. Con un corazón cargado de dolor y venganza, su presencia imponente y cautivadora despierta temor y admiración a partes iguales. Su bel...
Me encuentro en una situación desconcertante en la mansión de Liam Valtore, un misterioso vampiro de sangre pura. A pesar de mi cautela y desconfianza, no puedo ignorar la atracción que siento hacia Liam, cuya presencia imponente y atractivo físico me intrigaba.
Liam, con su autoridad y carisma, exuda un aura de misterio y confianza que despierta mi curiosidad. Sus ojos azules penetrantes parecen querer desentrañar mis pensamientos más íntimos, creando así una conexión peculiar entre nosotros.
Aunque me mantengo firme en mi desconfianza hacia los habitantes de la mansión, no puedo evitar sentirme atraída por la presencia magnética de Liam y la sensación de familiaridad inexplicable que lo rodea. La tensión entre ambos se palpa en el aire, mientras me debato entre mi instinto de supervivencia y la fascinación que despierta en mí el enigmático vampiro.
Entre la intriga, el peligro y la atracción, me veo envuelta en un juego de poder y seducción con Liam Valtore, un ser que parece ocultar secretos profundos más allá de su atractivo físico y su imponente presencia.
-Siéntate, por favor. Tomó mi silla y esperó pacientemente a que me sentara, desplazándola hacia la mesa con una cortesía inquietante. Luego se sentó a mi lado, su presencia irradiando un aura de peligro y misterio. Sin rodeos, comencé a interrogarlo:
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-¿Cómo llegué a este lugar? ¿Por qué estoy aquí? ¿Quién eres tú y qué quieres de mí?
-Veo que tienes muchas preguntas, Eva Riven.
-¿Cómo sabes mi nombre?
-Eva Riven, 24 años, nacida en una granja remota a las afueras de la ciudad, huérfana a los 5 años, adoptada por Jeison Riven, y hermana menor de Eduard Riven. ¿Me equivoco, señorita cazavampiros?
En ese instante, un escalofrío me recorrió la columna vertebral. ¿Cómo era posible que este hombre supiera todos esos detalles íntimos sobre mí, incluso mi identidad como cazadora de vampiros? Comprendí que estaba frente a alguien extremadamente peligroso, alguien que había estado observándome desde las sombras, esperando el momento adecuado para atacar. La sensación de ser perseguida, acosada, era casi tangible, y un terror helado se apoderó de mí cuando me di cuenta de que no era la cazadora, sino la presa.
- ¿Me has estado investigando?, dije frunciendo el ceño, mi voz traicionando mi inseguridad y desagrado ante aquella afirmación.
- Una pregunta a la vez, señorita. Primero, pido disculpas si su llegada a la mansión fue demaciada brusca. Melody tomó medidas extremas para traerla hasta aquí, pero como sabíamos que no vendría por voluntad propia, tuvimos que noquearla y mover su cuerpo inconsciente. Segundo, mi nombre es Liam Valtore y usted se encuentra en mi propiedad. Tercero, mis intenciones para que esté aquí no son de su incumbencia. Solo quiero que le quede claro algo, señorita: aunque intente escapar, lamentablemente eso no será posible. Así que acostúmbrese a su nuevo hogar.
