Capítulo 25

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Kiara

En el comedor los amigos de Aiden me invitaron a salir esa noche, lo plantearon como una escapada inofensiva, pero cuando llegue al lugar me percate de que no contaba con las características dichas.

Primero, ingenié un plan de huida sin ser muy obvia. Me duche, maquillé con tonos oscuros e hidratante de labios, vestí unos pantalones de cuero, jersey rojo y con la antigua chaqueta de Aiden -esta la guardé en la mochila a mis espaldas-, cuando estuve lista le envié un mensaje.

Te espero en la calle catorce.

Ahí estaré.

Bajo las escaleras a paso lento, mamá y papá estaban en la sala viendo la televisión, el reloj marcaba las diez de la noche. Cloud lamía una de sus patas al final de los escalones, levantó la vista, lleve un dedo a mi boca indicándole que no haga ruido.

Permaneció callado, aburrido volvió a su labor de antes. Suspiro, aliviada, en mi mano derecha sostengo mis botas negra. Estoy a solo centímetros de abrir la puerta cuando Cloud maulla, mis padres rápidamente giran la cabeza.

-¿A dónde crees que vas, señorita? -preguntó mamá, cruzándose de brazos.-¿Pensabas escaparte?

Me doy la vuelta, una enorme sonrisa decora mi rostro.

-Que va- bufo- Claro que no. Jamás haría algo así. - ambos arquean la ceja, escondo los brazos tras mis espaldas, nerviosa -Quería dar una vuelta por el vecindario, es todo.

-¿A estas horas? ¿Y sola? - extraña papá.

-Unos amigos del instituto esperan por mi a unas cuantas cuadras.

Sarah está sorprendida, el hecho de decir que tengo amigos a parte de Jess y Liam, para ella es innovador. Si supiera a dónde va su preciada hija de seguro le da un infarto.

-¡Fantástico! Creíamos que eras una frustrada, hija. Es bueno enterarse de qué estas haciendo nuevos amigos. ¿Cuándo los conoceremos? ¿A qué se dedican sus padres? ¿Tienen buen promedio? Sabes que debes enfocarte en los estudios y rodearte de personas que te sumen, nada de ochentas y mal comportamiento, sino no te aceptarán en la universidad Harvard.

-Tranquilizate mujer, aún faltan dos meses para las inscripciones.

-Tiempo insuficiente, debe irse preparando desde ya y más si seguirá nuestros pasos. En el derecho, el tiempo se venga de las cosas que se hacen sin su colaboración.- Cita su frase favorita, Cloud se ha subido en sus piernas y es acariciado por papá.

La programación de la tv es interrumpida por los anuncios, los minutos corren y me despido de mis progenitores, poniéndome los zapatos.

Cerrando la puerta mamá grita:

-¡Te quiero en casa antes de las dos!

-¡Llegaré antes!

Planeo ver el ambiente, si no es de mi agrado le pido a Aiden que me regrese a casa, el cual me espera recostado en un poste de luz fumándose un cigarillo, el humo sale lentamente de su boca y la mirada perdida en la calle.

Lo abrazo por la espalda, se tensa levemente, pero al verme relaja los músculos. Sonriente tira la colilla al piso, dando una última calada. Envuelvo mis brazos en su cuello, el cual inclina para el encuentro de mis labios.

El sabor a cigarillo inunda mi paladar, mas no me disgusta. Muevo los labios sobre los suyos, marcando un ritmo suave y constante, Aiden lo mantiene con agilidad. Es un experto besador.

Acaricio los mechones de su nuca, arrimándome a él. Sus manos enjaulan mi cintura y me conduce hasta su monto, donde me sienta y se separa.

-Estás preciosa.

Cartas En Febrero ©Where stories live. Discover now