Dos niños corren por una gran plaza, llena de gente y vida, los comerciantes gritan y negocias agitados, mientras que la gente camina apurada por las alborotadas calles, la gran plaza central, es el corazón de la ciudad, todo aquel que se viva en el imperio conoce la gran plaza como la palma de su mano, no hay lugar con mas diversidad y con mas historias que contar que este, y los dos niños que parecieran ser los únicos que viven en su propio mundo, si disponen a pelear con espadas de madera.
Solaris: yo soy el comandante Solaris líder de los domini maris nunca podrás derrotarme.
Nautilo: pues yo soy el comandante nautilo líder de los domini maris y soy invencible
Solaris: no puedes ser el comandante también yo ya dije que soy el comandante
Nautilo: entonces soy el general de los domini maris
Solaris: entonces yo soy el gran almirante
Nautilo: entonces yo soy el emperador!
los niños pelean con espadas de madera corriendo y gritando por toda la plaza, horas después ya en el atardecer los niños se hayan escondidos mirando desde un tejado como los domini maris entrenan en la orilla de la playa, los niños sueñan con la historias que se cuentan de estos legendarios guerreros.
Solaris: algún día seremos como ellos nautilo.
los domini maris señores del mar, la tropa de elite del gran imperio del mar, una legión imperial tan diestra que no tiene comparación.
El gran imperio del mar, el imperio mas grande que se haya visto, un reino tan basto como imponente, forjado por los grandes emperadores de antaño que buscaban crear un paraíso, con el tiempo el imperio se fue contrayendo, sus torres blancas y su mármol liso se hizo conocido en el sur, y junto a sus imponentes legiones imperiales protegen este paraíso junto al mar.
los niños se despiertan al otro día de golpe, la campana del centro de la ciudad suena sin parar.
Nautilo: que paso?
Solaris: no se no se! vamos a ver que paso
el quinto emperador a fallecido...
la gente se reúne en la plaza central, los domini mari marchan con el ataúd dorado del emperador, la gente lanza flores, todos lloran el deceso de su soberano, los niños sin entender mucho, se escabullen entre las piernas de la gente tratando de ver que es lo que ocurre.
esa misma tarde el sexto emperador es nombrado, el hijo del quinto emperador, Barius el silente.
Barius un hombre alto delgado, porta la armadura dorada imperial llena de lujos y detalles, su largo cabello negro tapa su rostro dejando ver solo su boca, su corona dorada de laurel se posa sobre su oscuro cabello.
lo coronan en la gran catedral, campanas y canticos suenan, vitoreando el nombre del nuevo emperador, viva Barius, las legiones lo gritan una y otra vez BARIUS!...BARIUS!.
los niños observan todo desde una ventana en lo alto de la catedral, preguntándose como pueden estar todos celebrando si hace un momento lloraban el deceso del emperador, acaso tan poco dura el duelo de su soberano, tan poco importa después de su muerte, estos pensamientos queden grabados en la mente de Solaris que a su corta edad no comprende como la gente es tan hipócrita, nautilo por otra parte, le brillan los ojos, y se le pone la piel de gallina al escuchar como resuena por toda la catedral el nombre del nuevo emperador, y la gente lo adora como a un dios.
Barius llamado el silente, por siempre tener un perfil bajo, hace callar a la gente con un movimiento de mano, el nuevo emperador esta apunto de decir sus primeras palabras como supremo soberano del imperio del mar.
Emperador Barius el silente: mi padre no murió de una enfermedad, murió de pena al no ver en vida lo que siempre anhelo con toda su alma,
LA CONQUISTA DEL NORTE...
Emperador Barius el silente: como emperador no dejare el sueño de mi padre sin cumplir, y declaro a partir de hoy GUERRA contra las tierras del norte.
la gente grita y vitorea con alegría y jubilo la declaración del emperador, los dos niños se miran emocionados, una guerra, es una aventura para ellos, algo en lo que algún día podrán participar y así forjar sus historias.
no pasaría mucho tiempo para que estos niños se introdujeran el el gran curso de todas las cosas, comenzando a ser parte esencial de esta historia.
6 años después...
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Dominus Imperator
Fantasíados amigos sueñan con ser parte del ejercito del imperio del mar, su sueños se verán realizados pero no por mucho tiempo, ya que una fatídica batalla cambiara el destino de estos amigos a uno que nunca se esperaron.
