Capítulo 1: ¿Soy un príncipe?

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Bueno, me presento, mi nombre completo es Björn Hölder, mejor conocido como el Milagro de Berlín, se me otorgó este apodo ya qué llegué como un Milagro a Berlín y Alemania, siendo el principal inventor del desarrollo de tecnologías altamente avanzadas en el área de la tecnología, desde pequeño ya se me había reconocido como la persona más altamente inteligente vivo en la era moderna. Fui reconocido en el área del desarrollo tecnológico cuando a los 15 años fue el principal ejecutor de que por fin se pudieran poner chips inteligentes en el cerebro humano. Ahí fue cuando mi carrera científica despego, pero realmente estaba interesado en conseguir una fuente de energía prácticamente ilimitada, la energía nuclear no estaba mal, pero para mí no bastaba.

Así que decidí gastar gran parte de mi vida en el desarrollo de la misma, debido a mi historial conseguí una cantidad gigante de recursos y fondos ilimitados para usarlos a mi gusto siempre y cuando mostrara avances satisfactorios, aunque claro, jamás mostré más de lo necesario, era un invento que quería mantener para mi mismo con el fin de que no pueda ser robado y recreado para fines de guerra.

Y al final fue así, los grandes inversores como puede ser Estados Unidos y Rusia planeaban usar mi invento para fines de guerra, y esto lo supe al tener bastantes informantes infiltrados. Así que decidí destruir el invento junto a mi ego y mi vida. Dándoles falsas esperanzas a los inversores, solo invite a aquellos que tenía confirmado los cuales usarían mi invento y la guerra, y fueron nada más que los presidentes de Rusia y Estados Unidos.

Y ahora estoy aquí, sin una maldita idea de como es que sigo vivo después de que prácticamente me explotó un sol en la cara. ¿Tal vez viaje al tiempo? ¿Una realidad distinta?

Tantas posibilidades, y tan poco tiempo. Más bien debo decir, no sé donde estoy, ni quienes son estás personas tan raras quienes me rodean.

"Nos tuvo muy preocupado, Dominic", menciona una de las sirvientas fr pelo negro mientras tiene algo de ropa en su regazo. "Estuvo inconsciente por dos días enteros".

"¿Qué paso?" Pregunto, intentando procesar lo que está pasando ahora mismo.

¿Qué está pasando?

Lo último que recuerdo es que estaba tirado en el piso y que mi proyecto de energía de fusión explotó. Entonces... Sigo vivo. No lo sé, ¿será alguna especie de alucinación momentos antes de dormir creada por mi propio cerebro?

"¿Te encuentras bien?" Pregunta la mujer de pelo blanco, sus ojos son del mismo color.

Miro con mayor detalle a mi alrededor, es como si estuviera en una habitación de la edad medieval de un noble.

"Eh... no lo sé, me duele un poco la cabeza". Digo mientras me sobo la parte superior de mi cabeza, es como si me hubiera dado un pequeño golpe, pero al menos no tanto para quejarme, seguramente en un rato se me pasara.

"¿Está seguro de que no le duele tanto? Se... golpeo la cabeza bastante fuerte". Menciona una de las sirvientas a mi lado.

"Sí... te caíste desde las escaleras". Dice la mujer de pelo blanco con un tono de preocupación genuina en su voz mientras acaricia mi cabeza, revolviendo mi pelo.

Cientos de recuerdos invadiendo mi mente, memorias que no son mías.Entiendo... Así que soy el tercer príncipe de la familia real, mi nombre es Dominic Schmidt, actualmente tengo 14 años, y soy el hijo menor de los tres hermanos, y la mujer de pelo blanco es mi madre.

"Tu padre estuvo muy preocupado por ti". Dice mi madre, cuyo nombre es Merry Schmidt.

"Eh... ¿Y dónde esta él?" Pregunto.

"Él está ocupado en su oficina, pero iré a informarle", dice, para luego voltear a ver a la sirvienta de pelo castaño. "Ve a informarle a Aldous, por favor".

┕𝑼𝒏 𝒄𝒊𝒆𝒏𝒕í𝒇𝒊𝒄𝒐 𝒆𝒏 𝒐𝒕𝒓𝒐 𝒎𝒖𝒏𝒅𝒐┓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora