𝕻𝖔𝖗 𝖚𝖓 𝖒𝖊𝖏𝖔𝖗 𝖋𝖚𝖙𝖚𝖗𝖔 [𝕋𝕒𝕟𝕛𝕚𝕣𝕠 𝕩 ℝ𝕖𝕒𝕕𝕖𝕣]

𝕔𝕒𝕡í𝕥𝕦𝕝𝕠 𝟟 - 𝕔𝕒𝕞𝕚𝕟𝕠 𝕒 𝕝𝕒 𝕡𝕒𝕫

Estoy sufriendo, ¿Okey? 😭

Tuve unos problemas familiares que me hicieron atrasarme hasta con la escuela por lo que falte como tres días, casí no dormí durante este tiempo así que mientras escribo esto me arden los ojos.

Perdón por el inconveniente, se que les prometí actualizar seguido pero es que estoy muy cansada al punto de querer pegarme un tiro 🥰🔫

Note que en el capítulo anterior tenía muchas faltas de ortografía debido a que no lo revisé, si así esta ese no me imagino los demas, Perdón por eso tambien.

Ya los dejo seguir con la historia sin estar chingando 😻

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A la mañana siguiente seguiste trabajando hasta quedarte dormida de vuelta, tu cara en el libro y la tinta cayendo de la mesa era clara señal de cansancio, Yoru no dejaba de maullar haciendo que vuelvas a lo que hacías no sin antes darle de comer.

-¿Debería ir a comer?- te preguntaste a ti misma mientras veías la ventana que dejaba a la vista una hermosa de cuando el sol sale.

Dudaste por un momento pero finalmente saliste de tu habitación y te dirigiste a la cocina.

-ush, tengo hambre pero no quiero comer, ¿Que carajos será?- suspiras y agarras una manzana para proceder a volver a tu habitación.

Vuelves a tu habitación y te quedas en el futón abrazandote a ti misma, "¿Porque me está pasando esto ahora mismo?, nunca me había sentido así" te apretaste con fuerza sintiéndote ridícula.

Sin si quiera morder la manzana, te quedaste dormida profundamente, el tiempo pasaba y tenías pesadillas que más bien eran malos recuerdos de el pasado. en todos ellos aparecías sola aun sabiendo que había gente a tu alrededor, aún dormida lágrimas se formaban en tus ojos.

Despertaste de golpe, el ardor en tu estómago era horrible, saliste de la habitación una vez más y te dirigiste a la cocina, el lugar estaba vacío así que decidiste prepararte un poco de arroz. Una vez listo te sentaste y comiste en compañía de la brisa.

Terminaste tu comida, lavaste tu plato y te dirigiste a el jardín, observaste el cielo mientras caminabas entre las peonías. Decidiste subirte a el tejado, aunque con mucha dificultad lograste subirte, te sentaste en este y abrazaste tus piernas mientras te apoyabas en tus brazos.

-hola hola~- escuchaste una voz suave al lado tuyo, al momento de voltear te encontraste con la señorita Shinobu la cual te miraba con una sonrisa vacía.

-buenas noches señorita Kocho- te sentaste dejando tus manos a tus costado y estirando tus piernas -¿Cómo se encuentra?-

-Bien, gracias por preocuparte. ¿Tu te encuentras bien?, es que te vez desanimada- te tomó por sorpresa su comentario.

-si... es solo que tengo muchas cosas en la cabeza, ¡pero ya pasara!. Lo siento si la preocupé- dices apenada mientras suspiras.

-uh, tranquila, se que todo va a pasar, si necesitas hablar recuerda que siempre estoy disponible- en tu rostro se formó una gran sonrisa mientras la mirabas agradecida.

-¡Si!, gracias señorita Shinobu- tus orejas se tornaron rojas debido a la emoción.

Pasaron las siguientes tres horas platicando hasta que dieron las dos de la madrugada y decidieron dirigirse a sus respectivas habitaciones.

Una vez llegaste te encontraste a cierto gato tumbado en tu futón con la panza mirando hacía arriba, te acercaste y lo arrimaste ligeramente para ocupar un poco de el espacio en el futón, simplemente dormiste intentando no pensar en nada más.

En tus sueños te encontrabas sentada en un río con los pies descalzos, notaste que empezó a llover así que decidiste ir rumbo a casa por el camino en el que acostumbrabas a ir, pensaste que la lluvia empezaría suavemente pero en un abrir y cerrar de ojos un aguacero estaba cayendo encima de ti, el frío te hacía temblar sin control y relentizaba tus paso. De pronto un grito se hizo presente, el miedo se acumuló en ti reviviendo recuerdos de rumores que escuchaste por el pueblo, todo se repitió, el miedo se transformó en tranquilidad al encontrarte con Tanjiro pero eso no duro mucho ya que rápidamente te preocupaste por la herida que el tenía.

Abriste los ojos al sentir el sol pegar en tu cara, tu mirada se dirigió a Yoru ya que se encontraba acostado en tu pecho.

-ush, me duele todo- te quejaste al no comprender la razón de la molestia que sentías.

Te paraste y te dirigiste a el comedor donde te diste cuenta de que todas excepto Shinobu estaban comiendo, hiciste una reverencia y te dirigiste por tu tazón a la cocina, volviste a el comedor y desayunaste con ellas.

-buenos días- dijiste dirigiendote a todas a lo que ellas respondieron de igual manera, aún tenias sueño así que una vez comiste volviste a la habitacion pero esta vez para buscar tu kimono, ya lista para bañarte te dirigiste a el lugar correspondiente.

Lavaste tu cabello suavemente con cuidado de no maltratarlo aunque sea solo por un momento ya que cada que hacías tus actividades diarias no le tomabas importancia y lo dañabas bastante. Lavaste tu cuerpo es cual tenía unas pequeñas cicatrices de cuando caminabas entre arbustos en busca de hierbas.

Terminaste de bañarte y te dirigiste a buscar una canasta en tu habitación, caminaste en busca de Aoi y una vez ka encontraste tocaste su hombro.

-Señorita Aoi, viy a salir a buscar hierbas, vuelvo antes de el amanecer, no voy muy lejos- le mostraste tu canasta a lo que ella asintió.

-Con cuidado T/n- le diste una sonrisa y saliste de la finca caminando hacía el bosque que estaba a las afueras de esta.

Te pasaste toda la tarde ahí ya que sentías una gran pasión por las plantas medicinales y sus fantásticos efectos sobre el cuerpo humano. Tambien recogiste algunas flores lindas que encontrabas por ahí, su aroma era embriagador y te daban una sensación de satisfacción increíble.

Caminaste hacía un pequeño río no tan alejado de la salida, sumergiste tus pies y la tranquilidad te invadió, recuerdos lindos con Tanjiro aparecian en tu memoria, tus orejas se coloraban y suspirabas suavemente mientras que tu pecho se calentaba.

Luego de un rato de tranquilidad te paraste y te dirigiste de vuelta hacía la finca