Caminos a Ti.

Capítulo 23

—Creo que lo de tener filtro no es lo suyo. —Noah rio levemente.

—De seguro es la razón por la cual nos soportamos. De igual forma, Hunter tiene este concepto de "nuevos ricos" quienes ganan mucho dinero, pero no saben cuidarlo naturalmente, eso es solo algo que diría alguien que nació rico como él.

—¿Hunter es rico?

—No es como millonario, pero viene de una familia de generaciones en la política, su bisabuelo casi fue el primer ministro o algo así. Nada raro.

—¿Nada raro? —Dije sorprendida.

—Es Hunter, qué más da. Ni todo el dinero que tiene me hace verlo diferente, sigue siendo el mismo tonto de siempre. —Noah sonrió.

El imbécil hubiera querido aprovechar esa amistad para conseguir algún beneficio, y creo que Xavier estaría feliz de rodearse con alguien como Hunter, por su familia. A Noah no le interesaba más que él le agradase.

—¿Te gusta esta marca de chocolates amargos?, no hay de los que siempre comes. —Noah frunció el ceño moviendo los chocolates y desordenando un poco.

—Está bien esa marca. —Tomé su muñeca para que se detuviese, creo que los acomodadores ya tenían demasiado trabajo para intentar ordenar el desorden que estaba dejando la rubia.

—¿Segura?

—Claro, vamos a seguir comprando antes de que más gente llegue.

—Bien, vamos por más caramelos.

—Me preocupa tu consumo problemático de azúcar.

—Mis dientes están perfectos. —Ella abrió su boca para mostrarme sus dientes. —Y mis exámenes de sangre dice que estoy bien, quiero disfrutar de mi juventud.

—Cuando estes vieja verás las consecuencias.

—De seguro tendré alguien que me cuide. —Noah se puso frente al carro y se inclinó para mirarme mientras se apoyaba en este.

—Si es que llegas consumiendo toda esa azúcar lo dudo. —La moleste. —Tienes que cuidarte si quieres llegar con alguien a esa edad.

—Bien, mi meta del próximo año será empezar a reducir mi azúcar, aunque en mi defensa me ejercito mucho. —Noah hizo un puchero. —Quizás podríamos hacer ejercicio juntas, así ambas nos aseguramos de llegar a esa edad.

—El ejercicio no es lo mío, me rendí con ello.

—Bien, de todas formas, hay otras formas de ayudarte a hacer cardio. —Mis mejillas se sonrojaron.

—Noah.

—¿Qué?

—No digas esas cosas.

—¿Qué tiene de malo?

—¿Estamos en público? —Noah ladeó su cabeza.

—¿Qué tiene de malo?, mantenerte activa y preocuparte por tu corazón es fundamental. Puedes hacer yoga, o pilates, incluso dicen que el Tai Chi es bueno para la salud. —Me sentí más avergonzada al saber que no había segunda intenciones en sus palabras. —O podemos subir montañas y esas cosas.

—Eso ultimo definitivamente no es lo mío. —Noah sonrió.

—Está bien, buscaré alguna manera de mantenerte activa. —Ella me guiñó un ojo antes de empezar a caminar nuevamente.  Mientras recorríamos los pasillos vi algunas tortas que vendían, entonces recordé algo.

—Noah. —La rubia me miró mientras caminábamos. —¿Cuándo es tu cumpleaños?

—¿Quieres mi carta astral?