❝ 𝐁𝐀𝐃 𝐇𝐀𝐁𝐈𝐓 ❞ ━━━ [𝘈𝘪𝘥𝘢𝘯 𝘎𝘢𝘭𝘭𝘢𝘨𝘩𝘦𝘳]

━━ 𝘊𝘢𝘱. 𝙄𝙑

➤ POR FIN TENIA EL CUARTO DEL HOTEL para él solo, el silencio le reconfortaba, y el simple hecho de que su prometida no estuviera cerca le aliviaba, se había salvado de un posible interrogatorio del porqué estaba tan agotado.

No quería que lo descubriera después de haberse encontrado con aquella mujer en el bar.

Un par de tragos, frases baratas, ciertos coqueteos, y ya la tenía comiendo en la palma de su mano.

Era algo que siempre hacia para calmar el estrés, era una forma de buscar una liberación a sus pensamientos.

Pero por más mujeres que se llevara la cama, en su mente siempre estaba presente aquella figura rubia que se topó en aquella noche de lluvia. Una claramente despistada chica que quedó grabada en su memoria.

Y que extrañamente le recordaba a alguien familiar, solo que no sabía a quién.

Tomó un baño caliente y se puso una ropa cómoda, no sabía exactamente qué hacer, y aunque era liberador tener algo de espacio, Aidan sentía un vacío que no sabía cómo llenar.

Se recostó en la gran cama y desbloqueó su celular, topando con un correo electrónico que le pareció algo... Particular.

❝ De: Preparatoria Heming

Le invitamos cordialmente
a la reunión de ex alumnos
de la preparatoria Heming
con objeto de celebrar el
Aniversario n° 100 de su
Fundación.

Hora: 05:00 pm.
Lugar: Salón A-3
N° de acompañantes: #1

¡Te esperamos!
(No reenviar este mensaje) ❞

Miró extrañado aquel e-mail, ¿Reunión de ex alumnos? Esto debía de ser una broma.

Se sentó en la cama leyendo una y otra vez aquel texto, ¿Debía ir? A decir verdad extrañaba aquellos años de escuela, pero, hacia tiempo que no veía a alguno de sus amigos en esa época, a excepción de Nicholas.

Buscó entre sus contactos a su amigo, con tal de llamarle para ver si también había recibido un correo similar, ya que el simple hecho de pensar en volver a ver a esas personas era una vuelta en el tiempo a aquellos años que tanto deseaba estar otra vez.

Un tono, dos tonos, y por fin contestó...

— ¿Hola? — preguntó Nick al otro lado de la línea.

— ¿También recibiste ese correo? — preguntó sin rodeos.

— Ay, hola Aidan, buenas noches ¿Cómo estás? Yo bien — dijo con sarcasmo al notar los pocos modales del castaño.

— ¿Recibiste ese correo o no? — interrogó con un tono hostil.

— ¿Cuál co...? — preguntó pero se detuvo al entender a lo que se refería — ¿La reunión de ex alumnos? Sí, lo recibí esta tarde.