Game Over, Ayano Aishi {OC × Male! Osoro Shidesu}

Capítulo 1: Segundo año

Segundo año en Akademi y todo era tranquilo en la segunda semana, con alumnos estresados por aquí y delincuentes por allá, pero no era nada fuera de lo común, según lo que aprendió Yumei en su primer año.

Nunca olvidaría su desafortunado encuentro con las bullies cuando apenas había ingresado. Ella solo quería pedir indicaciones y la habían tratado como basura por su forma de vestir (lo cual no tenía sentido, porque estaba siguiendo las pautas del uniforme). Su error fue haber sido expresiva y poner los ojos en blanco, porque luego pasó todo el año limpiando su reputación gracias a los rumores que habían esparcido de ella, e intentando convencer a sus comañeros de que no era parte de la yakuza, ni tampoco era novia del líder de los delincuentes.

Ella ahora no era una chica con la reputación más baja de toda la escuela, simplemente estaba entre los neutrales y un poco de buena imágen, esos que en gran parte son olvidados y no tomas en cuenta. Prefería eso antes que ser como Kizano Sunobu o Musume Ronshaku.

Pero por suerte hay personas como la líder del club de jardinería, Uekiya Engeika, que era conocida por ser una muy buena persona y tratar a todos como su familia. Una chica merecedora de cualquier halago y digna de la admiración de Yumei. No era secreto para nadie cuánto adoraba a su líder.

A todo esto, Yumei caminaba hacia el club para celebrar el comienzo de las actividades. Nadie podía borrarle la sonrisa brillante en el rostro.
Amaba a Uekiya y a las demás chicas. Después de todo, habían sido su único apoyo durante el principio de su infernal ambiente escolar de el año pasado, antes de que Fred Jones y Amai Odayaka se sumaran a su vida.

Este año iba a retomar el lugar en el club, y con gusto iba a dedicarle todos sus años en Akademi. Le gustaba pensar que la líder confiaba tanto en ella como para dejarle el liderazgo para su siguiente año, luego de su egreso. Pero aun así le ponía triste pensar que no vería más a Uekiya.

Ya tenía a la vista el lindo jardín. No le importaría pasar al lado de los vándalos, si no fuera porque había un círculo de personas, seguramente viendo una pelea. Y para sorpresa de nadie, el ganador fue Osoro Shidesu, el chico más fuerte de Akademi y el dichoso líder de los delincuentes.

Le disgustaba este tipo de actitudes a las espaldas de los profesores. Pero por falta de pruebas, los golpes solo en zonas tapadas y los testigos -amenazados- a favor, nunca les daban castigo, a excepción de las peleas muy ruidosas. Aunque escuchó de que hicieron una reunión para saber cómo tratar con ellos porque eran irrespetuosos e irresponsables, se desconocía la conclusión de la facultad.

Ella nunca lo admitiría en voz alta, pero se quedó mirando la escena. Lo cual le costó caro, porque se chocó con un arbusto, atrayendo la atención de la manada.
-¿Qué estás mirando, florcita? Piérdete- Dijo el de camiseta amarilla, Umeji, a quien le acompañaban con risas los de su grupo.

Ella no era de meterse en problemas, incluso si miles de insultos rondaban por su cabeza ahora mismo. Solo suspiró, contó hasta tres y continuó su camino al jardín, como siempre. Pero su semblante se había oscurecido visiblemente.

Los delincuentes podían arruinar su día con una simple mirada, y no era nuevo para sus amigas escucharla decir cuánto es que despreciaba sus, a palabras de ella, inmaduras peleas. Incluso si ninguna sabía el porqué de tanto desprecio, ya que nunca escucharon de un enfrentamiento o burlas de ese grupo hacia su amiga. Pero nadie se lo cuestionaba demasiado, porque todos sabían que no necesariamente se debían tener malas experiencias para alejarse de ellos.

-Buenos días, Yumei ¿Seguirás en el club este año?- Preguntó la rubia con una coleta, Himari Fujita, a pesar del notable mal humor que emanaba la entrada de Yumei. O eso era antes, porque reemplazó su expresión anterior por una a la que casi le salían brillos y arcoíris.