VIII

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-tenemos que hablar sobre el plan-fue lo único que dijo Armando sin contestar la pregunta contraria de cómo estaba.

-venía a hablar de eso justo, está todo planeado ya, pero hay un problema-comentó el contrario apoyando sus mano en una mesa tranquilo.

-Jacob creo que no es buena idea secuestrarlo, no se acuerda de nada, no presenta un peligro-comentó tratando de convercerlo de que no era necesario.

Días atrás al verlo de poli y cómo justo ese día apareció Jacob hablaron del tema y de todos los demás los cuáles no se sabía su paradero, al final terminaron hablando de un plan mientras bebian vino, el cuál iba de que querían secuestrar al rubio y si surgía matarlo pero luego de reflexionarlo el del gorro de pescador empezó a querer anular aquel plan de alguna forma.

-igualmente es un peligro y lo sabes Armando, no eres tonto, sabes lo que conyeba dejarlo vivito y coleando por la ciudad no me jodas, si tu decides pirarte del plan a mi eso no me importa-musitó el contrario muy claramente dando a entender que no iba a dar su brazo a torcer, porque Jacob no era una persona fácil de convencer cuando tenía las cosas claras.

-no hace falta matarlo, si solo se le amenaza y ya está, estará asustado y pues luego se le deja insconciente y se le suelta en medio del campo-dió otra alternativa mirandolo algo nervioso ya que no sabía si iba a aceptar no asesinarlo.

-Armando, Armando-le llamó casi cantando su nombre tranquilo, suspiro y le miró a los ojos serio, con una expresión tranquila-¿sabes que les pasa a los héroes? Porque yo se que tú eres comsciente de ello, lo has vivido-empezó a fumar en aquel despacho haciendo una pausa.-si quieres ser un heroe moriras porque eso es lo que hacen los héroes en esta ciudad, morir, porque aquí solo vale la regla del más fuerte. No sé porque te importa tanto ese chaval y ni siquiera lo quiero saber, pero te aviso que por mi parte ese chico está muerto y espero por tu bien que no te entrometas en mi camino, es solo un estorbo-y simplemente se fue sin dejar que el contrario respondiera, el jefe de aquel lugar estaba agobiado, no quería que Jacob matara a Gustabo, pero sabía que sí se entrometía se llevaría un tiro en la cien y morirían los dos en una cuneta.

Se sentó en una silla y puso sus manos en su cabeza algo agobiado trantando de pensar un plan o algo para poder hacer que nada le pasara al rubio.

Por otro lado el ojiazul se encontraba secuestrado dentro de un banco, tenía las manos levantadas y arrodillado mirando hacía la puerta en la cuál se encontraba Freddy negociando preocupado tratando de salvar al inspector, parecía que al comisario solo y exclusivamente le importaba Gustabo porque ni siquiera nombraba a Isidoro en ningún momento.

-Bien eh ya te he dicho todos lo altos cargos neno-el de mayor rango se había inventando todos los nombres, al igual que Gustabo cuando le preguntaron dentro de aquel fleeca antes de la llegada de Freddy-ahora suelta a Gustabo y al alumno-esa fue la única vez que habló del de el corazón en el pelo.

-va a salir solo el alumno-comentó el que portaba un pañuelo verde en la cara empujando al alumno fuera del fleeca.

-por él queremos que nos quites el pájarito que se escucha por ahí-silvo girando su dedo esperando a que se retirara aquel helicoptero.

Una vez que negociaron el secuestrador soltó a Gustabo fuera de aquel banco, en cuanto salió Freddy se acercó a él preocupado guardando su arma en la cartuchera que portaba en su cinturón.

-¿Gustabiño estás bien? ¿Necesitas algo?-lo guió hacía el patrulla y le abrió la puerta para que se metiera en el coche, el rubio solo le siguió el rollo al del cargo mayor y apoyo su cabeza en el cristal de la ventana del copiloto del Z cuando se metió.

El ojiazul observó cómo los agentes se empezaban a meter en los patrullas preparados para la persecución, cuando escuchó la puerta del patrulla donde se encontraba dio por hecho que era Isidoro, pero no lo era, Freddy se había subido al patrulla y había mandado al mujeriego a otro coche ya que estaba empeñado en ir con Gustabo.

-Gustabiño neno ¿estás bien?-cuestiono empezando a conducir detrás de los lodrones-Gustabiño responde-gritó Freddy agobiado por el silencio sepulcral del rubio quien solo estaba pensando y se asustó ante tal grito del comisario.

-no me grites Freddy joder-se quejó bajando la ventana del coche con el arma en la mano observando serio a sus secuestradores, en cuanto el patrulla paró el ojiazul bajó abatiendo a los dos maleantes serio y metiendose en el patrulla dejando que su superior encasquetara a los detenidos a otro binomio.

-¿patrullas conmigo neno? o haces 10-10-ofreció el gallego metiendose en el patrulla para luego mirar al inspector jefe quien solo asintió levemente cosa que fue suficiente confirmación para el pelinegro quien puso música y le pisó al coche rápidamente ignorando los reclamos de Gustabo ya que no le gustaba poner música y tampoco la canción que sonaba.

𝚅𝚎𝚗𝚞𝚜... (Nadantabo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora