Después de la supuesta muerte del mejor amigo de Khun Agüero Agnis, queda con los demás que se hicieron amigos de Bam para seguir escalando la torre y ayudar a Rachel, la estrella de Bam; para cumplir su última voluntad.
Dentro del joven Khun, pasa...
Escuchó por ahí, que quiere darle algo para su hermano menor, solo tiene ese indicio de ella. Un hermano menor, entonces por eso tal vez cuando iba sola tardaba más en volver; tal vez haya estado buscando un regalo para él.
—Te siento muy serio y sombrío... ¿Estás bien?— preguntó con una suave sonrisa. —Estoy bien, solo pensaba un poco— se acercó.
Enid comenzó a limpiar con cuidado el desastre, tocando el lugar, siendo cuidadosa de no tirar nada, tenía una mirada calmada, sus ojos estaban cerrados mientras hacía la tarea de limpiar.
—¿No crees qué es raro pero triste?— comentó la dama mientras tiraba restos de manquilla y guardaba otras cosas con cuidado. —¿Qué?
Se quedó por un momento callada, y comenzó a pensar en como decirlo; es conocida por su imprudencia y a pesar de no tener malas intenciones, a veces causa problemas por decir cosas inapropiadas en el momento incorrecto.
—... Es que... Tú sabes, Bam, su muerte... No puedo sentir lo que Rachel sentirá en estos momentos, tal vez sea muy difícil para ella aceptar que Bam no está. Hizo una pausa antes de abrir la llave y lavar unos moldes.
—También... Sé que es difícil para ti— fue honesta.
Eso sorprendió al chico de cabello celeste, ¿no se supone qué no es obvio con lo qué siente? Oculta bien lo que siente mayormente y es bueno leyendo a las personas si sienten algo e intentan ocultarlo. Aunque con Enid es muy fácil. Es como si de cierta forma, ella fuese un libro abierto en cuanto mostrar emociones.
Sabe bien que a pesar de que a veces lo niegue, es muy obvio por su cara lo que siente.
—Lo es pero...— se quedó callada —.... Nada. Dijo para tirar las galletas y mejor optar por darle uno de los pastelillos que compró para Rachel, tal vez debería rendirse en hacer estás cosas, lo hace mal, y no importa que tanto se esfuerce, ¿por qué una ciega haría galletas o siquiera cocinaría?
Suspiró pesadamente y Enid se despidió de Khun para ir a ver a Rachel.
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Era de noche, o al menos en ese piso, y Agüero seguía investigando ciertas cosas para tener más información, así como finalmente rastreó a la persona que quería ver. Edin Dan.
Se sentó en el sofá cansado, sus ojos estaban llenos de tristeza y mucha desesperación, ¿era bueno ser tan realista? Lo es, pero no se sentía tan seguro de su deducción. Si Bam está vivo o muerto.
Deseaba soltar toda su frustración, a pesar de ser consciente de que él mismo iba asumir toda la carga, necesitaba sacarlo. Admite que no es el mejor dando ánimos o al menos intentando distraerse para no pensar en esos pensamientos que solo lo hacen sentir mal o más preocupado, es un orgulloso, pero sabe que alguien como él es un tanto complicado.
