Capítulo 4 - Mal entendido

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Entre abrió sus ojos, la luz de la habitación lo cegó por unos momentos al mover su vista hacia su costado pudo notar al chico de cabellos plateados que leía muy entretenido lo que parecía ser una novela, aunque no podía leer nada del titulo. Le dolía bastante la cabeza.

- ¿Donde estoy? -Pronunció con voz ronca, intento sentarse sobre aquella camilla pero una punzada lo detuvo. 

- Oye, tranquilo.

Kakashi se levantó de su asiento y se dirigió preocupado hacia el rubio, quien tenia una gran mueca de dolor en su rostro mientras intentaba levantarse. 

- ¡Na-ru-to! -Se escuchó a una mujer gritar mientras la cortina que cerraba la camilla se abria abruptamente- Que te he dicho de andar corriendo, sobre todo hablando de las escaleras pedazo de idiota. 

La mujer parecía realmente molesta por esta situación que le habia interrumpido su preciado desayuno. 

- Abuela Tsunade... -Su voz se quebró, su cuerpo se sentía cansado y adolorido, su corazón le pesaba bastante. Tsunade a sido una de las personas que siempre ha estado para sacarles sus dudas, lo ah ayudado y le a dado consejos en sus discusiones que ah tenido con Sasuke cuando iba a charlar con ella. 

Comenzó a llorar.

- Lo siento, perdoname... -Logro decir entre lágrimas- No fue a propósito.

- Ya tranquilo -Consoló Tsunade acercándose a él y dejando un besito en su frente- Nadie se cae a propósito, pero te has golpeado fuerte déjame que te revise, ¿Si?

- Si.

Naruto de a poco se fue calmando, su llanto ceso en lo que Tsunade lo revisaba de pies a cabeza. 

- Bien, parece que le golpe en la cabeza no a sido nada grave. -Dijo con tranquilad- Te lo agradezco. -Se dirigió hacia Kakashi, quien le sonrió amablemente. -Tu tambien deberias agradecerle, Naruto, él fue quien te trajo hasta aquí.

Naruto y Kakashi se miraron, habia como una especie de tensión que ninguno de los dos sabia cómo interpretar o tomar. Cuando Kakashi pudo cruzar mirada con aquellos ojos azulados, algo brillosos por el llanto, su lobo se inquietó.  Se sintió cautivado, pero trato de no demostrarlo en el exterior e incluso se enojo consigo mismo por esta actitud. ¿Que mierda le pasaba?

- Yo... -Dijo Naruto bajando su mirada al piso- te lo agradezco, Kakashi. 

Por algún extraño motivo, algo en su pecho se sintió cálido por un momento, estaba nervioso. 

- No fue nada. -Dijo seco, saliendo de aquella pequeña sala. Al cruzar la puerta, dejo caer su espalda sobre la pared. ¿Porque carajo estaba ruborizado? ¿Fue por como lo dijo? ¿Acaso su lobo se estaba volviendo loco o que? Algo no estaba bien. 

No sabe cuántos minutos pasaron desde que se quedo pensando en aquella idea tan extraña, esa sensación que nunca habia tenido ni el motivo por el cual su lobo se sentía cautivado por aquel chico. 

De repente, vio que la puerta de la enfermería se abrió y el rubio salía de ella, por un momento pensó en irse, su trabajo o buena obra del dia ya estaba hecha. 

- Oye, ¿Quieres que te acompañe? - Antes ni siquiera de darse cuenta, ya estaba al lado del rubio haciendo aquella extraña pregunta. 

- Estoy bien, gracias. -Dijo Naruto un poco asustado de la repentina aparición de aquel chico.

- El golpe que tuviste no fue cualquier cosa, aparte puedes volverte a lastimar o algo -Ni siquiera el tenia claro porque mierda estaba diciendo todo aquello, intentado que el rubio no se fuera, algo en él sentia que debia cuidarlo, y eso estaba siendo preocupante. 

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