"¡Richard! Madre mía ¡Casi no te reconocí! ¡Te has vuelto realmente espléndido!"

"Jajajaja ¿Espléndido? ¿Después de convertirte en conde ya hablas con esas palabras tan propias?"

"De verdad que... Wow. ¡Maldito! Deja de ocultarte de mi por una vez en tu vida ¿Quieres?"

"Ven aquí y no me dejes ir, imbécil."

Era una de las pocas personas que realmente amaba. Tenía una apariencia delgada y seria que no era característica del hijo del vizconde de Derbyshire, pero, al menos se parecía muchísimo a su padre en términos de amabilidad. ¡Era adorable!

Pero justo antes de que terminara de abrazarlo, resultó que ya había dos bellezas con cabello rubio esperando justo detrás de él:

"¡Arok!"

"Rafiel y Ariel. ¡Hoy de verdad se están luciendo con la lista de invitados! Que bueno verlos. Lo digo de verdad."

Los dos, con brillantes mejillas color melocotón, eran los hijos omega del vizconde de Westport. Estaban mucho más cerca de la familia Derbyshire que de la familia Taywind, por lo que era evidente con quién habían interactuado más desde que eran chiquillos. Rafiel le había dicho que se hospedaban aquí mientras sus padres estaban de viaje para celebrar su vigésimo aniversario de bodas y que por eso asistir a la fiesta estaba fuera de discusión.
En pocas palabras, Rafiel y Ariel, eran esas tipicas personas que siempre atraían la atención de los alfa con sus hermosas apariencias y sus personalidades fabulosas. Las razones por las que el vizconde de Westport y su esposa los dejaban al cuidado de familiares de confianza cuando viajaban eran bastante predecible y se traducía en que, ya que eran unos jóvenes tan atractivos, tenían miedo de lo que pasaría si andaban por allí sin un tutor o un guardia. Incluso Richard, que era como un primo para los dos, siempre pareció tener una mirada más gentil que de costumbre cuando iba dirigida a ellos.

Fue en ese momento en que llegó una persona inesperada también: El Marqués de Wolflake. Un sujeto de ojos gris metálico que contrastaban perfectamente con su precioso cabello oscuro.

"Mi querido Conde de Taywind."

"Mi querido marqués de Wolflake".

Con una personalidad tan fría y reservada como su apariencia, nunca había esperado verlo en el salón del vizconde de Derbyshire en un día laboral. ¡Mucho menos en una fiesta y de noche! Y mientras se saludaban con un simple apretón de manos, encendió un cigarrillo, tomó una copa de vino y le pasó una a Rafiel incluso aunque él no había pedido nada. Ahora que lo pensaba, estaba muy pegado a los hermanos Westport, y pareció cuidar de los dos mientras conversaban de sus propios asuntos a la distancia. Luego sintió que una mirada extraña se había intercambiado entre el alfa y el inocente omega y fue como... Si tuvieran un secreto.

Arok los miró. Fascinado con la idea de tener un nuevo chisme que contarle a Hugo cuando volviera a casa. Rafiel se dio cuenta de eso casi de inmediato así que se apartó.

"Yo... Am... ¿Han florecido muchas rosas este año también, Arok?"

Rafiel hizo esta pregunta un poco como para cambiar de tema. Ariel, parado a su lado, sonreía como si supiera algo.

"Sí. De hecho, estarán en floración en unas pocas semanas".

"¿Vas a hacer una fiesta nocturna este año también?"

"La voy a hacer. El jardín de rosas es muy hermoso bajo la luz de la luna."

Rafiel dijo: "¡Quiero ir!" Haciendo que Arok se echara a reír mientras pensaba que era una súplica bastante linda.

En el jardín de rosas (Traducción Finalizada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora