Baile

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Jaemin sonrió para sí. De repente, se vio rodeado de muchos chicos alfas y en ese momento se dio cuenta de que era el omega más popular de la fiesta de fin de año. Bien, no era por ser narcisista, pero los pocos omegas de la realeza que se encontraban en el lugar no eran la mitad de bellos que él. Su designación pertenecía a la luna amarilla, la cual los hacía comportarse más tímidos que los de la luna roja, al ser omegas sumisos y no dominantes como él. Si algo de bueno tenía ser omega, era pertenecer a la luna roja dominante, ya que, a diferencia de las otras lunas, la roja les otorgaba poder y distinción frente a los alfas, sin tenerles miedo por su poderoso desplante.

—Tu piel es bien linda —le coqueteó descaradamente un alfa del planeta vecino. Jaemin solo sonrió amplio. —Es en serio, ¿todavía no tienes veintiuno, verdad? —insistió sonriente el chico. 

Jaemin sacudió la cabeza, observando al sonriente alfa. 

—El próximo año, que será en horas —comentó con una risita. El chico asintió con una sonrisa. 

—Entonces no me voy a perder la fiesta de tu presentación, yo todavía no encuentro a mi omega —sonrió. —Puede que seas tú, ¿no crees? —flirteó con descaro. 

Jaemin solo rio entre dientes; de todas formas, este vizconde era apuesto.

—¿Quieres bailar? —le habló otro alfa. 

—Claro, si al vizconde Roar no le importa —indicó mirándolo a la expresión extraña del otro chico. 

—Adelante —el vizconde murmuró con educación, asesinando con la mirada al alfa que se llevó a Jaemin a bailar al centro de la pista.

—Tu piel es muy bonita, ¿Te lo habían dicho? —señaló sonriente el chico. Jaemin se echó a reír; había oído esa frase toda la noche. 

—Es la primera vez —mintió con una sonrisa agradable. 

Eres un mentiroso —habló Jeno en su mente. Mierda, Jaemin buscó al chico con la mirada y lo encontró cerca de la chimenea. 

¡Deja de hablar en mi cabeza! —gruñó con ojos ponzoñosos. 

Jeno dio un sorbo a su bebida antes de contestar: —Me estaba dando repugnancia escuchar todas esas cosas, debía parar tu mentira, ¿no? —Alzó una ceja.

Jaemin dio una vuelta, siguiendo el baile. Luego, al regresar su atención al chico parado al lado de la chimenea, habló: —Nadie te pidió que espiaras mis interacciones sociales. —Hizo una mueca.

Jeno rodó los ojos. 

Eres un pedazo jugoso de carne enfrente de muchas bestias hambrientas, ¿Le llamas a eso interacción social? —Dijo con una risita.

Jaemin apretó los labios y dio otras vueltas por la pista hasta regresar su atención a Jeno. 

Cállate, estás celoso porque soy más atractivo que tú. —Murmuró mirándolo con ojos brillantes.

Jeno se echó a reír. 

Por supuesto, tú eres el omega, ¿No? —Susurró con voz burlesca. Ugh, Jaemin apretó los labios.

Ya deja de hablar en mi mente. Ni siquiera sé por qué pasa esto. —Se quejó, escuchando algo que el alfa con el cual bailaba murmuró. 

Honestamente, Jaemin no alcanzó a escuchar bien porque el chico idiota del sector dos le estaba hablando en su mente: —No lo sé, creo que debo averiguar qué pasa aquí. Tal vez es compatibilidad, yo espero que no. —Jeno murmuró con voz áspera.

"Love On The Brain" ☙ | 𝗻𝗼𝗺𝗶𝗻Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang