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Cada minuto que pasaba, la tormenta era mas fuerte, la fuerte arma varonil, me inundaba, no podía dormir, el en cambio, dormía como un angelito, custodiada en sus brazos, era la única forma de que el me dejara dormir.

Su respiración en mi cuello era pausada, con calma. Mi cuerpo pasaba una corriente, así no podría seguir, odiaba recordar esos buenos momentos, en donde solo vivía del amor, últimamente me volví seca, la persona a la que nada le importa, prácticamente me volví egoísta, teniendo miedo de que me volvieran a hacer daño, no me quería volver a enamorar, y llegar aun punto en el que no pueda vivir, si no fuera por Adrian no sé que seria de mi, sin sus risas y raras bromas, es mi mejor amigo, dejando aun lado que sea mi hermano, lo amo y se muy bien que él no me haría daño, solo me protegería de todo aquel del que se me acerque

-deberías dormir un poco – dijo con voz suave, aun sin moverse, su aliento chocando en mi cuello

-no puedo – dije

-te siento tensa – dijo levantando un poco la cara para verme mejor

-lo estoy – le aseguro – créeme no me gusta mucho la idea de estar en la cama contigo en esta posición

-pero si antes te gustaba – dijo pasando su mano por mi cara, acomodando mechones de mí cabello

-ya no soy la misma niñita de hace unos años, la Que creía todas tus mentiras

-nunca te dije mentiras – dijo el separándose de mi

-¿a no? ¿Quieres que te recuerde que mantuviste una relación secreta con la que se hacia llamar amiga? – dije furiosa

-no lo entiendes – dijo mirando el techo

-y ¿Qué quieres que entienda? Tú eras el que decía que me amabas, mientras tú te acostabas con ella a mis espaldas

-todo tiene una explicación...

-la cual no quiero saber – dije mirándolo con dureza

-¿Por qué me haces esto? – pregunto con suavidad

-para que sepas que nada en la vida es como uno quiere – dije sentándome en la cama

-de eso ya me di cuenta – dijo aun acostado – y entiendo que no me quieras pero por lo menos ¿quieres ser mi amiga?

-no te comportes como un estúpido adolecente...

No puede terminar de hablar cuando sentí sus labios posados en los míos, moviendo se con suavidad, mi cuerpo no reaccionaba, trate de empujarlo pero fue imposible, con suma delicadeza me tumbo en la cama, posándose enzima mio....

Perdón? -NinaJauregui95Where stories live. Discover now