—¡sí, señor! —respondieron todos con cierto temor.

—¿se comieron uno? —preguntó byeongtae a hosuk y eunwoo.

—no, acabo de plantar el mío.

—yo también planté algunos, y los demás los tengo guardados en mi bolsillo —eunwoo señaló su pantalón.

—¿por qué?

—quiere plantarlos en su casa para hacerse millonario —respondió hosuk.

eunwoo se sintió orgulloso de su gran idea, pero de inmediato dejó eso de lado cuando se fijó en byeongtae.

—¿te los comiste? —preguntó eunwoo con sorpresa y preocupación al notar que byeongtae tenía el recipiente casi vacío donde tenía sus propios cacahuates —es demasiado ¿estás bien?

—sí —respondió con cierta duda ¿iba a estar bien, cierto?

—¡y recuerden, para obtener un milagro necesitan esforzarse, así que ahora a plantar!

al escuchar la demanda del profesor, todos se pusieron manos a la obra, pero entre el bullicio que se armó, el estómago de byeongtae sonó, y para su suerte, la campana del receso también.

—bien, tomen diez minutos de descanso, continuaremos después. les voy a cortar eso si orinan en cualquier lugar —terminó de decir el profesor para luego mostrar unas tijeras.

—¡sí, señor! —respondieron temerosos de que aquello se hiciera realidad.

eunwoo se levantó para ayudar a gyeonkdeok a dar agua fresca a sus demás compañeros, la temperatura estaba muy alta y estaban en pleno sol.

—¡eunwoo, el profesor te llama!

—¡voy! —avisó para luego dejar el agua nuevamente a cargo de gyeonkdeok —¿por qué me llamará? ¿me querrá quitar la idea del cacahuate? —se preguntó con cierto recelo.

mientras eunwoo se dirigía hacia donde estaba el profesor, byeongtae corría hacia un lugar lejano para evitar ser visto mientras hacía sus necesidades.

sentía que todo en su interior iba a colapsar, ya no aguantaba más.

—eunwoo —lo llamó el profesor en cuanto lo vio —como sabrás, en unas semanas se viene la candidatura para ser el próximo presidente estudiantil ¿qué piensas al respecto? tus calificaciones son muy buenas y te llevas bien con los demás.

—lo siento, profesor, pero creo que paso —la verdad es que no le interesaba en lo absoluto, sentía que iba a ser mucha presión para él —si bien sería un honor, no creo que sea apto para un cargo así.

—¿estás seguro?

—sí, lo siento nuevamente.

—está bien —dijo con resignación —volveré enseguida. diles a los demás que vuelvo en cinco minutos.

eunwoo simplemente asintió y se dirigió de nuevo hacia donde estaban sus compañeros, pero al llegar, solo se encontró con alguien de otra escuela golpeando a daejin y a yeongho.

—¿qué sucede? —le preguntó a la primera persona que vio.

—park jongmin de la escuela técnica está buscando a byeongtae para golpearlo.

—¿qué?

eunwoo se acercó más para ver bien toda la escena, aquel chico llamado jongmin estaba a punto de enloquecer mientras miraba en todas direcciones.

—¡si alguien intenta detenerme, juro que le partiré la cabeza! —gritó jongmin amenazándolos con un alicate, para luego salir corriendo en busca de byeongtae.

—está loco —susurró eunwoo viendo como el chico se perdía de su vista.

la clase había terminado y todo había vuelto prácticamente a la normalidad, solo que eunwoo comenzó a estornudar demasiado, a tal punto que tenía que tener pañuelos a un lado de él para sonarse la nariz.

sabía perfectamente que se estaba empezando a resfriar.

de verdad lo odiaba y ni siquiera había terminado el período escolar. aún faltaba la clase de historia.

—entonces, ese es el período de los estados de guerra ¿entendieron? —preguntó el profesor —se necesitó mucha lucha y violencia para que toyotomi hideyoshi unificara el país, pero una vez que lo hizo...

la voz del profesor se hizo aún más lejana para eunwoo. cerró los ojos un momento, pero los volvió a abrir al instante solo para presenciar como una tiza volaba en dirección a la cabeza de byeongtae.

aquello le causó mucha gracia, pero no estaba en posición para reírse.

—¿escuchaste algo de lo que dije? ¿por qué ocurrió la guerra de imjin?

—exactamente... me pregunto lo mismo —respondió, ocasionando carcajadas por parte de los demás.

—ven aquí, rebelde insignificante.

byeongtae se levantó y se acercó al profesor, este de inmediato le dio golpes con una batuta y comenzó a explicarle todo lo que había dicho con anterioridad.

eunwoo dejó de prestar atención a todo. realmente quería irse a su casa para descansar.

con el permiso del profesor, el chico salió del salón directo a la enfermería.

quizás si dormía un poco, el dolor de cabeza se iría.

se recostó en una camilla y cerró sus ojos sin saber que pronto se llevaría a cabo una guerra entre la escuela agrícola contra la escuela técnica de buyeo.

𝐒𝐎𝐔𝐑 𝐆𝐑𝐀𝐏𝐄𝐒, boyhood  Where stories live. Discover now