Invierno de colores✓

VEINTISIETE

—Aaaaaaaaaaaaa —dijeron al mismo tiempo

—¿Acaso qué pensaban? Dios.

—Eso es más sencillo —ella me sonrió—. ¿Sabes? Un día vi una de mis comedias románticas, bueno, la repetí porque ya la he visto demasiadas veces. El punto es que vi que el protagonista llevó a la chica de la que estaba enamorado a dar un paseo en globo, y justo cuando estaban lo suficientemente alto...

—¿Cayeron y murieron? —pregunté

—No —me miró mal—. Él le dijo que la amaba. ¿No es eso lo que quieres decirle a Mack?

—¿De dónde voy a sacar un globo aerostático en pleno invierno? —elevé una de mis cejas

—Ese ya no es mi problema —se encogió de hombros—. Tú querías ideas, ¿o no?

Torcí mis labios, considerándolo

¿En serio lo estoy considerando? ¿En qué cabeza cabe? Le temo a las alturas, no podría hacer algo como eso y no arruinarlo.

Necesito pensar en algo mejor.

—Hijo —mi abuelo me llamó—. ¿Al menos le propusiste salir contigo?

—Ahm... no.

—Entonces dile que salga contigo esta noche.

—¿Cómo voy a decirle que salga conmigo esta noche si aún no he planeado nada?

—Se lo dices y ya —bufó—. Tu cerebro trabaja mejor bajo presión.

—Gracias —ironicé

Rodé mis ojos, tomando el teléfono en mis manos

Bueno, puedo pedirle que salgamos. Es algo sencillo y me dirá que sí. Ahora sólo debo hacer que Jonas vuelva a cubrirla junto con Wendy y que también me ayuden a planear la cita perfecta.

Suena simple. Lo he hecho otras veces.

Entré a nuestro chat para empezar a teclear.

Yo: ¿Salimos esta noche?

Yo: Por cierto, soy tu novio.

Sonreí por mí mismo, esperando.

No me respondió en ese instante.

Ni en los próximos diez minutos que me quedé en la misma posición aguardando. Con el teléfono en una de mis manos, sentado, mirando la pantalla...

Nada.

Mi ceño se arrugó cada vez más.

Bueno, quizás está ocupada y no puede responder ahora.

Se lo diré más tarde cuando la busque a la cafetería.

Seguro debe estar trabajando.

Como si quisiera responderme a mí mismo, elevé mi rostro hacia la ventana donde había mirado hace un rato. Y en ese preciso instante, pude observar claramente como Mack salía de su casa, terminando de ponerse su abrigo. No pareció mirar mucho hacia donde estaba, se concentró en su teléfono. Miró algunas cosas, entonces lo guardó y salió más rápido, empezando a caminar por la calle

Hasta que desapareció de mi vista

Miré el mío.

Ni una respuesta de su parte.

Vale, puede que esté empezando a exagerar.

Quizás estaba pensando en algo más y no notó mi mensaje. Posiblemente lo vea más adelante. No es como si se me haga extraño que sea casi medio día y apenas esté saliendo al trabajo de su madre cuando normalmente sale a las ocho o más o menos a esa hora.