Young and Beautiful

Dear Lord.

Petite étoile: Estrellita.

Mon coeur: Mi corazón.

[...]

Las manos del peli-negro estaban inquietas; no dejaban de arreglar lo que era un traje, mirando intensamente su reflejo e intentando inútilmente desaparecer arrugas inexistentes; sintiéndose asfixiado en este. En un intento desesperante afloja un poco la corbata que le estaba asfixiando.

–Petite étoile, ¿Te vas a desamarrar esa corbata por décima vez? Me estas poniendo nervioso.

Rápidamente la mirada del peli-negro se dirige hacia un punto más hacia la derecha del espejo, encontrándose con su hermano sonriéndole.

–Barty- La voz de este salió de manera cortada, dando a entender de las lágrimas que estaba reteniendo- Estoy asustado- Sin perder el tiempo el peli-negro se dirige hacia su hermano abrazándolo con fuerza.

–Tranquilo petite étoile, todo va a salir bien no te preocupes- Este en un intento de tranquilizar al que tenía en brazos le da unas caricias en la espalda- Hoy es su día, es tu día; sabes muy bien que Sev no retrocederá en estos momentos, y si lo hiciera muy bien sabes que no lo dejaría ir.

Ese comentario siendo lo suficiente gracioso para sacarle una sonrisa al peli-negro, dando a paso a que se separen del abrazo.

–Lo sé, pero- Titubea un poco- No es por Verus, jamás sería por él. Si no más bien; por ellos.

–Mírame bien Regulus- Agarrando fuertemente los hombros del más bajo para que este lo viera fijamente– Ellos ya no tienen derechos sobre ti, ¿Y sabes por qué? Porque ellos están muertos.

Los ojos de Regulus chocan con los de Barty, sin pronunciar nada ya que sus miradas se comunicaban de la mejor manera en un; "Estoy para ti" y en respuesta un "Sé que siempre estarás".

–Pero bueno, ya paso todo eso; ahora solo concéntrate en este día, en ti y en Severus. Todavía me sorprende que se van a casar sabes, siempre pensé que tú le pedirías matrimonio fue una sorpresa que él te lo pidiera.

El de mechas verdes se paseaba por la habitación buscando algo sin dejar de sonreír en el acto. Regulus suelta una sonrisa de labios sellados y da un suspiro.

–Losé, yo también pensé en eso, nunca pensé que Verus me pidiera matrimonio, y no era porque dudara de su amor, eso jamás; solo que en nuestra relación yo siempre fui el más lanzado. Pero que él tuviera la iniciativa fue lo más inesperado del mundo.

Regulus se voltea hacia el espejo que hace un rato estaba hostigando.

–Mon coeur, A pesar de todo, siento que se me va a salir el corazón, por Merlín; no sabes cuánto amo a este hombre, su perfecta sonrisa, su carácter de mierda que siempre muestra con los demás qué joder, contrasta con la actitud que me dedica a mí y solamente a mí; muchos no entendieron como mierda yo me enamore de él cuando la verdadera enigma es ¿Como él se enamoró de mí? Maldita sea, yo era una persona tan detestable y era hermano de uno de sus abusadores, pero él nunca me encasillo en lazos de sangre. Pero aún con eso, él me ama.

Dando un suspiro que mezclaba sentimientos Regulus por fin se anima en ver al de mechones verdes topándose que este tenía una cara asqueada.

–No me puedo acostumbrar a la dulzura de tu mirada cuando hablas de Severus- Suelta una arcada fingida pero no tan fingida.

Incrédulo, Regulus levanta una de sus cejas perfectamente peinadas (cortesía de Pandora).

–Bartemius, llevamos ocho años juntos y en unas horas me voy a casar.