—Es un gusto— espeta Meredhith dedicándole una sonrisa.

—El gustó es mio—

Ella asiente

Tomo mi moto y la adentro en una pequeña merquesina que hay en la casa y salgo de una vez.

Enoc no se hace esperar y llega con las llaves en mano, me encamino al Mercedes Benz 2022 que está a unos cuántos metros de nosotros y tomo de la mano a Jessica como toda actitud que me caracteriza.

El auto es de mi padrastro que recién conozco y la verdad me cae muy bien, durante estos meses que mi mamá estuvo sola conoció a este tipo que es muy buena persona. El y yo nos llevamos muy buena onda no puedo negarlo y su relación con mi mamá la respeto mucho.

—Maximo, deja que las chicas se vallan atrás para que se conozcan mejor— dice Enoc pintándose en su posición se copiloto —Nosotros vamos adelante chicas—

—Me parece buena idea— espeta Meredhith abriendo la puerta de atrás.

—De ninguna manera— suelto de pronto — Tu con tu chica atrás y yo con la mía de copiloto— finalizo y énoc se va al asiento trasero .

Le dedicó una mirada fulminante a Meredhith y la risa de ella resuena en el vehículo.

Yo también suelto una risa.

—Grasias— me susurra Jessica.

Le tomo el agradecimiento con un beso profundo, tomando de sus labios con pasión y haciendo que partes de su cuerpo empiezen a calentarse. Me corresponde de igual manera el beso y lo disfruto. Nos apartamos pronto ya que sabemos que no estamos solos.

Las luces del Mercedes están apagadas y agradezco por ello, pongo música y el ambiente se siente muy sólido.

—Quise innovar y por primera vez quise venir sin tener problemas de por medio— sus ojos cafés penetran los míos.

—Y yo digo que lo mejor que he hecho es traerte conmigo— rectifico dejándola tensa.

Antes de que tenga que decir algo aparcamos frente a la casa vieja mia, Énoc y Meredhith se bajan unisolo.

No se por qué Jessica y yo nos quedamos ahí, sumidos en el silencio pero no es nada extraño y no espero a que diga algo ni mucho menos que se baje del vehículo, solo tomo su mandíbula y la beso suavemente, de su parte no puede ocultar el deseo que me tiene y me toma por el cuello y me come la boca como siempre a querido desde que aparque enfrente de la casa, suelto un gruñido en mis labios y más adelante ella suelta otro, su lengua busca la mis con desesperación y al momento se la concedo.

—¡Que diablo eh! ¡Bajen ya!—

Nos exaltamos con el insulto que viene desde afuera y el golpe en la ventana, me hecho a reír y Jessica hace lo mismo, ignorando por completo a mi amigo.

Instuitivamente Jessica mira hacia abajo y ve mi entrepierna abultada.

—Asi es que me tienes— espeto agarrándome con fuerza en el pantalón.

—Sera mejor que bajemos— digo.

—Si— traga saliva —Es lo mejor—

Salimos y nos encaminamos a la vieja casa, énoc está preparando dos copas de vino para el y su novia, mientras que ella trata de conectar el estereo con su teléfono.

—Entonces nosotros no tomamos que solo estás sirviendo dos copas— espeto con dirección a énoc.

—Usted sírvase lo suyo y lo de su chica— me pasa por un lado con una sonrisa en su rostro —Ni si quiera se lo que quieren tomar—

°A través de un reto°Where stories live. Discover now