Fragmento Ocho | Coriolanus

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OCHO:
"MISSING IN ACTION"

Coriolanus volvió a la base a paso automático, el día de campo lo había dejado hecho trizas. 
Las últimas horas habían conseguido hacerlo olvidar todos sus problemas: su obligada nueva profesión, la lejanía con su familia y la escasez de dinero. 
Mientras acariciaba el cabello de Lucy Gray bajo la luz del sol, todo aquello se había desvanecido.

Una vez en su habitación se dejó caer sobre la cama sin reparar en nada más, y en menos de un parpadeo, ya estaba totalmente dormido. 

Durmió con tal placidez que cuándo su superior los despertó a ruido escandaloso, tardó al menos cinco minutos en comprender en dónde estaba. 
Ahora tocaba repetir la misma  rutina durante cinco días hasta que pudiese volver a ver a su chica. Eso iba a ser una buena motivación. 

Desayunó todavía dormitando un poco, pero, no lo suficiente aturdido como para notar que Sejanus, otra vez, no estaba en el comedor.
De hecho, ni siquiera recordaba haberlo visto cuando se había acostado la noche anterior.

¿Y ahora en qué se había metido?

No podía volver a estar en la enfermería porque hoy era su día de entrenamiento obligatorio, y por mucho que él detestase la práctica de tiro, su buena puntería dejaría en evidencia que se había fugado de sus responsabilidades.

¿No había dejado su etapa melancólica atrás?

Había creído que también había disfrutado el día de campo como él. 

Se tragó un par de cucharadas del desayuno sin saborear y cuándo todos sus compañeros empezaron a levantar sus platos los siguió intentando encontrar a Sejanus haciendo cualquier otra cosa que le hubiese impedido ir a acompañarlos en la mesa, pero no sirvió de nada, porque él no estaba por ningún sitio.

Se formó tras algunos de sus nuevos amigos y esperó mientras la angustia le carcomía en el pecho.

— ¡Snow! —el agente le dio un empujón—. El día libre ha terminado, céntrese en sus actividades o no va a volver a tener salidas el próximo sábado. 

¿Por qué nadie más que él parecía notar la ausencia de Sejanus?
¿Es qué lo estaba evadiendo por algún motivo?

No.
Eso no tenía sentido alguno.

Él tenía que haberse reportado al llegar, pero, si no lo había hecho entonces tenía sentido que nadie lo estuviera buscando.
¿Es qué nunca había llegado?

Porque no se lo había cruzado en el camino, pero ¿Y sí algo le había impedido llegar?

Cuándo se habían marchado el sábado por la noche, el guardia que les había aprobado la salida les había advertido sobre los posibles ataques de rebeldes. 
¿Podría ser esa la razón de su ausencia? ¿Podía haberse cruzado con un rebelde en medio del camino?

Disparó sin prestar atención, dándole sorpresivamente, casi al blanco.

¿Y sí Sejanus había sido herido por rebeldes por haber vuelto solo a esas horas de la tarde? 

Él no había tenido ningún encontronazo extraño, pero, quizá porque lo habían agarrado a él antes.

De pronto su imaginación tomo el control de sus pensamientos y empezó a ver distintas imágenes que no lo dejaban tranquilo en absoluto.
¿Y sí la familia de aquel rebelde lo había reconocido del árbol del ahorcado? 

Porque su tarea había sido hacer presencia, pero, Sejanus era un tipo grande, era difícil que no llamara la atención de nadie.

¿Y sí lo habían herido y ahora él estaba solo en algún sitio sin ninguna posibilidad de ser encontrado hasta dentro de una semana? 

don't blame me ✔Where stories live. Discover now