Mi playboy favorito - con Adam Levine (TERMINADA)

#1

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-buenos días. -habló una voz masculina.-
-buenos días, que se le ofrece. -contesté poniendo los ganchos a la ropa que se encontraba a mi lado.-
-¿tiene bolsa de regalos? -preguntó.-
-oh claro, se encuentran por....-me quedé petrificada al ver a Zac recostado encima del counter de mi caja.-
-¿Zac? -pregunté algo aturdida.- pero.. ¿que haces aquí? -pregunté.-
-oh si, vine a comprarle algo a mi novia y... pues necesito un bolso de regalo.. ¿me podría ayudar señorita? -preguntó y yo sonreí.-
-oh claro que si joven. -dije en voz burlona.- sigame por favor. -dije, miré a mi compañera a mi lado y ella asintió sonriendo dandome a entender que me ayudaria con los clientes mientras regreso.-

Abrí la pequeña puerta para poder salir de mi caja y la de mis compañeras. Caminé delante de Zac para disimular un poco y evitarme regaños por parte del supervisor.

-aquí es. -dije señalando los bolsos y volteandome hacia Zac con una sonrisa.- ahora si me disculpa, tengo que volver al trabajo. -dijo.-
-oh si, se me habia olvidado. Necesito ayuda para poder elegir uno, ya sabe... Los hombres no somos muy buenos con estas cosas. -dijo sincero.-
-oh claro, como no. -dije y el sonrio.- mire este, estoy muy segura que le encantará a su novia. -dije sonriendo y el me guiño un ojo.-
-estoy seguro que si. -dijo caminando hacia mí, me agarró de la cintura y yo sonreí.-
-su novia debe de ser muy suertuda al tener un novio cómo usted señor. -dije y le di un beso.-
-ah no, eso no es un beso. -dijo el y me agarró por la nuca y me beso muy fuerte, tan fuerte que me lastimo un poco.-
-auch. -me quejé.-
-hay no seas llorona. -dijo soltandome.-
-no tienes porque decirme así. -dije seria.-
-eres una llorona ¿entiendes? -subió su tono de voz.-
-no seas ridículo Zac. -dije tratando de calmarlo un poco.-
-¿como me haz llamado estúpida? -dijo acercandose a mí con fuertes pasos, yo trate de retroceder un poco pero choqué mi espalda contra una pared.-
-tranquilizate Zac. -dije tímida.-
-tu no me mandas. -gritó.-
-pues nó,no te mando pero estas haciendo el ridículo por una estupides. -dije.-
-y para colmo me sigues faltando el respeto. -dijo y levanto su brazo para pegarme, cubrí mi rostro con mis manos por el miedo que le tengo a mi novio.-
-¡ni te atrevaz a tocarla! -hablo una voz masculina llegando a mi lado.-
-Sr. Levine. -dije al levantar mi rostro para ver quien era, y mi gran sorpresa fue al ver a mi jefe a mi lado Y defendiendome.-
-¿y ahora?... ¿quien diablos se cree este? -preguntó Zac enojado.- y yo la trato como se me pegue la gana ¿entiendes? ¡es mi novia! , por tal razón hago lo que quiera con ella. -dijo alterado.-
-no no, aqui la pregunta es ¿¡quien diablos te crees tú?! -dijo y yo me sorprendí al verlo tan enojado ¿que diablos pasa aquí? ¿desde cuando mi jefe se pone así?.-
-maldito hijo de...-no dejé que Zac terminara de hablar y me puse entre medio de ellos dos.-
-¿que haz dicho?, el que yo sea tú novia no te da derecho a tratarme como se te antoje ¿entiendes?. -dije y el me miro muy serio, tanto que me entro un escalofrío del miedo que le tengo a este Zac.-
-madita hija de perra... - dijo y de repente me sentí caer al sentir su puño en mi rostro. Caí al suelo y toqué mi area lastimada (mi labio) quité mi mano y tenia sangre en mis dedos gracias al labio.-
-ya me arté, te vas a arrepentirde haberla tocado -dijo señalandolo.- ¡no la vuelvas a tocar!¿¡entiendes maldito hijo de perra!? -dijo y le dio un puñetazo en la nariz haciendo que callera al suelo. Se levanto y ahora me habló a mi.-
-esta me la pagaras maldita. -dijo ahora dirigiendose a mi. Me pateó en la costilla haciendo que me enconjgiera por el dolor en mi cuerpo. Y sin más, Zac salió de la tienda. El Sr. Levine me levantó en sus brazos y yo solo lo mire avergonzada por todo lo sucedido y el solo nego dandome un sonrisa y yo solo pase mi brazo por su cuello. Toda la gente nos están mirando a mi y al Sr. Levine con cara de preocupación.-
-no pasó nada señores. Porfavor sigan comprando. -dijo el Sr. Levine.-

Mi jefe abrió la puerta de su despacho y entró aún conmigo en sus brazos. Caminó hacia el sofá y me recostó en el. Se dirigió hacia su escritorio y sacó una cajita de primeros auxilios y se arrodilló a mi lado.

-Sr. antes que nada, entiendo que quiera despedirme lo entiendo. Es más si quiere me iré ahora mismo. -dije tratando de sentarme el el sofá pero fue imposible por el dolor y solté un chillido.-
-tranquila. -dijo sobando mi hombro.- ¿estás bien? -preguntó preocupado.-
-si si, gracias. -dijo soltando un gran suspiro.-
-te llevo a casa. -dijo y yo lo miré con los ojos como platos.-
-¿perdón? -pregunté aturdida.-
-que te llevaré a casa. -repitió.-
-no es necesario... Me vendrá a buscar Z... -me quedé en silencio al recordar lo sucedido con Zac.-
-ni creas que te dejaré ir con el imbecil de tu novio. -dijo molesto.-
-no, no me iré con el. -dije bajando la murada.-
-ese imbecil no te merece ¿entiendes?. No te merece. -dijo levantandome el rostro para poder mirarlos a los ojos y así hice.-
-pero, puedo coger el autobús. -dije nerviosa de tan cerca que estaba de mi y el negó.-
-yo te llevaré y punto. -dijo y no me quedo de otra que aceptar. El sonrió y se levantó del suelo para ayudarme a levantar y poder irnos. Ya era hora de cerrar la tienda por lo que ya mis compañeras se fueron. Y el Sr. Levine cierra la tienda ya que es el dueño.-
-gracias. -dije cuando me ayudo a levantar. Paso su brazo por mi cintura y yo puse mi mano en su hombro para poder caminar.-

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Hola, aquí está el primer capítulo. Espero que les guste y espero sus votos.♡