Izuku Midoriya: Asalto masivo

Capítulo 1: El chico de mis sueños

El pasado siempre va a perseguirte, es algo que todo ser humano debe de aprender para sobrevivir, la sociedad está llena de gente malvada, personas odiosas que quieren moldearlo todo a su favor.

Siendo un perdedor de veintidós años, Izuku Midoriya tuvo que aprender aquello con los golpes más dolorosos que le haya propinado la vida... Literalmente.

Pero no nos adelantemos. Todo comenzó cuando él era un simple nerd desempleado, en la acogedora casa de su mejor amigo, Katsuki Bakugou, y unos más.

— ¿Estás saliendo con una niña —preguntó la obstinada Kyoka Jirou—? ¿Te volviste un depredador acaso?

— No es una niña, ¿Okay —Izuku se volteó a ella con una taza de café—? Es una muchacha que va a la universidad, está en tercer semestre de comunicación social.

— ¿Y por lo menos es linda —Katsuki alzó la ceja en señal de sospecha—? ¿Cómo se llama?

— Ochako Uraraka —se sentó junto a todos—. Es agradable, muy linda y hace las cosas flotar, ya quiero que la conozcan.

— Si no hace estorbo está bien —gruñó Katsuki—.

— ¿Qué cosas han hecho —preguntó entonces Hanta Sero—? ¿Es oficial al menos?

— Pues... Hemos hecho varias cosas, como ir al arcade, la biblioteca, el parque...

— ¿Ya te la cogiste?

— ¿¡Qué!? ¡Kacchan, no —enrojeció a tope—! No he llegado siquiera a tomarla de la mano.

Tomó un sorbo de café con cierto estrés, sus amigos eran un poco entrometidos con sus relaciones... Pero era normal, sólo querían a un Izuku que estuviera a salvo de arpías asquerosas.

— Ten cuidado con quien te juntas, Midoriya —advirtió Hanta—. No queremos otro evento Creati.

— No, no, se los juro, Uraraka es muy diferente a Creati —sonrió con confianza—, realmente espero que funcione.

Tres golpes secos llamaron la atención de todos, Izuku se puso de pie alegremente.

— ¡Es para mí —se dirigió a la puerta y abrió encontrando a una tierna castaña de mejillas coloradas—! ¡Hola! Sabía que vendrías.

— Perdón si me tardé, la clase se nos extendió —dijo con su tierna sonrisa—.

Katsuki se aproximó y abrió más la puerta mostrando el lugar.

— Él es Kacchan, es mi mejor amigo y baterista —sonrió—, sus manos explotan.

— Qué hay —saludó rápido y cerró la puerta—. ¿No nos va a dar problemas?

— Es una buena chica, ni la notarás.

— Más te vale —volvió a abrir—. Soy Katsuki Bakugou, entra y no hagas ruido.

Ochako entró y vio a todos preparándose para ensayar.

— ¿Tienes una banda?

— Somos "Los Vigilantes", permíteme —recibió su abrigo y fue a colgarlo al perchero—, somos un poco conocidos y estamos preparándonos para un concurso.

— ¿Qué instrumento tocas?

— Guitarra. Ven, te presento a los chicos.

Fue con los demás a colgarse la guitarra en su cuello, señaló a cada uno.

— Kacchan es el baterista, Jirou es guitarra principal y vocalista, y Todoroki es bajista. Soy guitarra secundaria —guiñó—.

— ¡Vigilantes, uno, dos, tres!