RUSMEX WEEK 2023

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Capitulo 03.—Mi verano para ti

México disfrutaba de una cerveza, el clima era más cálido de lo habitual y le brindaba una sensación de paz indescriptible mientras descansaba en su hamaca, sumido en un pequeño momento de soledad y silencio. Un sorbo resonó en la botella de vidrio, y segundos después de que el líquido alcohólico atravesara su garganta, soltó un suspiro de total satisfacción.

Un sujeto médianamente alto, de piel blanca, ojos de cazador rojos y un desornado cabello negro miraba en la lejanía a México, como este se encontraba en su propio mundo, una sonrisa estaba dibujada en el rostro del sujeto y con todas las intenciones de ser la tormenta en la calma, se abalanzó contra él de alas.  México dejó caer la botella de vidrio, provocando que se rompiera en una cantidad desconocida de fragmentos, aunque el abrazo del tipo compensaba esa pérdida.

—"Lagartija"—respondió México, abrazando al chileno con sus alas.

-—Awevonado debemos hacer algo divertido. –sugirió Chile con picardía. Aunque los ojos del sangre azteca se llenaron de preocupación, aceptó la propuesta sin objeciones. ¿Qué era un poco de riesgo con intención para ellos?

Después se arrepentiría de sus decisiones de su yo del pasado.

Internamente, México se cuestionaba cómo fue convencido por Chile para irrumpir en el territorio de su antiguo amigo, Brasil. Se sentía algo extraño al pasear por las calles brasileñas, notando cambios significativos que lo dejaban sin palabras y, al mismo tiempo, lleno de orgullo por el esfuerzo y trabajo del brasileño. El palacio en medio de la playa había sido reconstruido y modernizado de manera excelente, se notaba el esfuerzo y trabajo duro del sur americano.Jalo de la camisa al chileno cuando unos guardias se acercaron repentinamente, obligándolos a esconderse detrás de una roca gigante. Sin embargo, el mar no estaba de su lado, una ola inesperada los sorprendió, el dúo no pudo evitar salir de su escondite y ser capturados por los soldados.

El dúo temía las consecuencias de infiltrarse en el territorio de un país en ascenso del segundo mundo. La posibilidad de ser acusados de traición y fusilados en la plaza rondaba sus mentes, pero la adrenalina del momento les impedía pensar con claridad y les ocasiona mal pensar su situación. Además tenían años que no se encontraban con Brasil, no estaban tan seguros de su seguridad en ese momento, cualquier cosa podría pasar.

—Me alegra que hayan podido venir - Habló rompiendo el silencio. —Ha sido difícil desde que comencé mi desarrollo, más porque dejé de pasar el tiempo con ustedes. Lo siento por eso.

—Nosotros también te echamos de menos - confirmó el chileno —verdad, México - Llamó por su nombre sin obtener respuesta  —¿México?

Mexico estaba confundido, el brasilero dijo que le alegraba que habían podido ir, era acaso que estaba escuchando mal, trato de indagar en sus recuerdos y en ninguno aparecía alguna invitación de su viejo amigo para que lo visitaran, desvió su mirada al chileno, si él no recibió nada por lo tanto fue su compañero quien recibe esa invitación, el ya sabia de que se volverían a reencontrar con Brasil, ahora todo tenía sentido.

—Al parecer Chile no te dijo nada verdad. —Brasil sonrió, rodando sus ojos verdosos, mientras movía su rostro de un lado al otro diciendo no.

—Sorpresa weón.

El de sangre azteca golpeó el hombro de Chile y salió de su transe, abrazó a su viejo y demasiado alto amigo latinoamericano, tenía mucho tiempo que no lo veía y lo extrañaba demasiado.

El salón estaba iluminado por candelabros, el sonido de un violinista que practicaba, todo era tan anticuado y aburrido para los tercermundistas, era como recordar su infancia en la tutoría del Imperio Español, algo nefasto.