Faraway Wanderers/Word of Honor- Mi Alma Gemela-WenZhou

Capítulo 3- Yendo a la Ciudad

Al día siguiente, se despertó Wen Kexing con un Zhou Zishu aún dormido en sus brazos. No pudo evitar mirar fijamente su cara, asimilando la belleza masculina impresionante que le hizo enamorarse. Después de un rato, se inclinó y le besó los labios suavemente, absorbiendo el olor dulce del incienso de flor de melocotón que impregnaba su pelo largo. 

Cuando trató de levantar la cabeza, el hombre debajo de él lo besó de vuelta y preguntó, "¿Por qué te levantas tan temprano?"

Se detuvo momentáneamente la respiración de Wen Kexing al oír el tono coqueto de Zhou Zishu, y aún más cuando el hombre lo rodeó con sus piernas. Se subió su túnica de noche hasta que se mostraban sus caderas desnudas. 

Se extendió un rubor por las mejillas de Wen Kexing y jadeó cuando Zhou Zishu cambió sus posiciones hasta donde estaba sentado encima de Wen Kexing, besándolo al mismo tiempo. Se arremolinaban sus lenguas por dentro de sus bocas, y cuando se rompió el beso, una cadena de saliva permaneció momentáneamente. 

Al mirar fijamente a Zhou Zishu, Wen Kexing extendió una mano y le trazó un dedo por el submaxilar agudo, diciendo suavemente, "Tonto, ¿fue tu intención de ponerme cachondo? Viajamos más tarde, así que podemos esperar hacerlo, ¿no?"

Zhou Zishu asintió con la cabeza y se levantó, respondiéndole suavemente, "Solo es que te quiero mucho". La única persona con la que quería estar estaba justo delante de él, y cada vez que estaba a solas con él, sentía como si fuera a explotar el corazón. Las palabras que acababa de espetar eran para él y solo para él. Si alguien le dijera a su yo más joven que resultaría saliendo con otro hombre, él habría estado incrédulo y se negaría que le gustaran los hombres, ya que habría sido un gran escándalo en la corte imperial—le dolían los dientes justo al pensar en lo problemático que sería y en todos los chistes que se contarían sobre él. 

Esas palabras inesperadas resonaron como trueno en los oídos de Wen Kexing, dejándolo boquiabierto. Extendió la mano para tomarlo de la mano, espetando, "A-Xu, yo también, te quiero mucho". Las lágrimas empezaron a derramarse por su cara, y se volvió áspera la voz. 

Al sentir que algo mojado caía sobre su mano, Zhou Zishu giró la cabeza y le echó un vistazo al hombre que se sentaba en la cama de sábanas blancas. En pánico, se apresuró a preguntarle, "¿Qué te pasa? ¿Por qué estás llorando de repente?" 

Wen Kexing no le respondió por unos minutos y solo lo abrazó firmemente, dejándolo sin espacio de respirar regularmente. "A-Xu, perdóname", dijo con una voz temblorosa de repente. 

Zhou Zishu estaba confundido, sin saber por qué Wen Kexing le pidió perdón. "¿Perdonarte por qué? ...", hizo una pausa antes de continuar con una voz baja a medida que le secaba las lágrimas con sus pulgares, "no llores". Por la primera vez en su vida, no se enojaba con alguien que prorrumpió en llanto, manteniendo la calma, e incluso secándole las lágrimas; no soportaba ver ni oír llorar a la gente, especialmente los niños pequeños. Sin embargo, la persona ante él no era niño, sino un hombre adulto—su esposo. Cuando era niño, le enseñaron que los hombres no lloran y que eso era poco varonil, pero después de haberse encontrado con el Maestro de la Valle Fantasma siempre misterioso y aquel niño llorona llamado Zhang Chengling, creía que todo eso era una mierda. 

Wen Kexing tragó saliva, su manzana de Adán moviéndose de arriba abajo. "Quiero ser una mejor persona para ti. Y así como también mejor influencia a Chengling. Soy Maestro de la Valle Fantasma y tú..." Sollozó antes de que Zhou Zishu lo interrumpiera. 

"¿De qué mierda estás hablando? Te lo dije, te considero buena persona. Sabía que te vengaste de lo que les pasó a tus padres, mis suegros", Zhou Zishu le dijo de agitación.