Un dia normal Micheal estaba paseando por la calle se cruzó con un compañero de su padre, a quien no debió dar su confianza, aunque él se veía muy majo y era joven, de unos 21 años, pero ahora gracias a esa mala decisión estaba en una situación muy mala, en la que había sido secuestrado por la persona en la que menos creía capaz de hacer eso.
Estaba en una especie de sótano atado a una silla y con cinta aislante en la boca impidiéndole hablar, lo cual le enfadaba y le aterrorizaba a la vez, estaba despierto sí y de vez en cuando forcejeaba con la cuerda, lo cual nunca servía de mucho, ya que no logró aflojarla tanto y eso le frustraba mentalmente, pero también le cansaba físicamente, lo cual le hacía respirar fuerte.
Llegó a tal punto de frustración en el que lloro y grito, pero no fue audible para nadie, se sentía patético y solo quería salir de alli lo antes posible, para volver a su normalidad de vida, pero tristemente eso no sería posible pronto y solo estaría alli encerrado sin interacción social ni nada, ojala nunca haberse cruzado con él.
Probablemente sería de noche a juzgar por el poco sonido de fuera y el poco sonido de fuera del sótano y probablemente dormir se le haría muy difícil, pero al menos tendría que intentarlo, para dormir algo y estar listo para lo que sea que le fuera a pasar en su estancia alli, suponía que lo más fácil era cerrar los ojos y no pensar en nada y estuvo en lo cierto, ya que al poco trato de hacerlo se durmió, al menos dormiría algo y de eso exactamente no se podía quejar para nada así que durmió tanto como pudo esa noche y se preparó para el dia siguiente y las travesías que le vendrían con eso.
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Empezamos mal :(.
