preguntas antes del show

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El lugar estaba silencioso.

-No me lo tome a mal señorita, pero en que momento se irán a despertar.

Ella se levantó de su asiento y camino hasta Jin Ling.

Ella toco su mejilla y le vio fruncir el seño.

-Muy pronto por lo que veo.

Con un giro elegante se volteo caminando a su asiento.

En el instante en que se volteo oyo sonidos de desconcierto.

Ella convoco unas enredaderas para sujetar a los más problemáticos.

-Damas y Caballeros me alegra que me honren con su presencia.

Ese comentario los despertó por completo.

Muchos iban a sacar sus espadas para comenzar una pelea pero se vieron afectados por unas plantas que les impedían la movilidad.

Un susurro de parte de tantos llamo la atención de Minako.

-¿Donde esta Sizhui?

-Aquí padre. – el comentario vino de detrás suyo.

Lan Wanji se volteo como pudo y suspiro al verlo.

-Mira Lan Zhan, el niño se parece a uno de los chicos policía. – le susurro el Nosferatu a su esposo.

-Mhn...

La chica aplaudió un par de veces llamando su atención.

-Verán están obligados a pasar con esta por un tiempo antes de poderse ir. Es un banquete de entretenimiento y diversión.

-Usted no tiene derecho ni nos puede obligar a estar aquí.

Ella suspiro.

No quería sacar esta carta ahora pero si no se callaban el vampiro se tomará un festín y tener que revivir a los que mueran será un dolor de cabeza.

Soltó su aura y hablo con fuerza.

-Mi nombre es Satoshi Minako. Que derecho tiene usted Líder del clan Jin. Y no se atreva a contestar me líder del clan Jiang. Creo que no se han dado cuenta que no están en un lugar en el que puedan hacer lo que se les da su regalada gana. Pero por la vida de un alma pura no los desintegrare o los mataré. Solo cuidado con sus palabras que pueden morir.

-El Patriarca de Yiling. – un grito salió de una mujer asustada al ver al Nosferatu.

-¿Quien? ¿Yo? – se señaló.

-No te hagas el tonto Wei Wuxian. Eres un maldito genocida – la voz de uno de los líderes de clan se alzó.

-Creo que confunden a mi siervo.

-Wanji...

-Hermano. – le respondió su hermano detrás suyo

-Hay dos. – dijo casi en un susurro pero con la cara llena de horror.

-Ahora si presentamos atención ¿Verdad?

-Me gusta tu ironía pequeña dama.

-Me alagas Conde, pero no. Ahora volviendo a lo que decía. Están aquí contra su voluntad. – ve una mano alzada. – Si Líder Nie.

El chico de abanico se levanto y hablo.

-Si no le molesta, quisiera... quisiéramos saber ¿Cual sera ese entretenimiento?

Ella brillo en alegría.

-Eso mi querido Socrates, es la pregunta que buscaba.

-¿Socrates?

Mdzs reacciona aWhere stories live. Discover now