PROLOGUE

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PRÓLOGO

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PRÓLOGO


Agosto, 1992

Arianna vio a su hermana melliza, con una sonrisa, para después extender su mano y que ella la aceptara.

—Creo que no estoy lista para verla—Murmuro Pansy

—Yo tampoco, Angy—Dijo Arianna—. Pero padre dice que ya no resistirá mucho más. A parte, ella quiere hablar con nosotras.

—¿Como se supone que voy actuar como si ella estuviera bien?

—Lo se, es difícil—Dijo Arianna, sonriendo

Las mellizas Parkinson eran parecidas en muchas cosas. Su pelo, era castaño. Sus ojos, eran azules. Lo único que las diferenciaba, era la forma de su rostro.

Pansy tenía eso de su padre, Simon Parkinson, mientras que Arianna tenía eso de su madre, Kate Parkinson.

Kate Parkinson, desde hace unos años, había adquirido una enfermedad la cual ya no podía ser curada.

Y aunque Arianna siempre fue la más apegada a ella, no tenía miedo de que su madre muriera.

Pues creía que lo mejor sería que ella descansara de tanto dolor que sentía. Pero tenía miedo. Miedo de que ella muriera y, Arianna y Pansy, quedaran al cuidado de su padre.

Arianna no le tenía mucho miedo a Simon, pero sabía que Pansy si le tenía. Y su padre no era el mejor, solo le interesaba que sus hijas fueran las mejores esposas, en un futuro.

Y tampoco las quería, pues él siempre soñó con tener un hijo, hombre. Que siguiera con el apellido.

Y también se los repetía cada que podía.

Arianna abrió la puerta, de la habitación de donde se encontraba su madre. Acostada en la cama.

Arianna siempre pensó que su madre era una mujer bella. Era rubia y de ojos azules. El típico estereotipo que que todos hombre tenia de la mujer.

Dejando de fuera la belleza, siempre supo ser una madre. Siempre las cuido, y las hacía reír.

—Hola, mamá—Dijo Pansy

La rubia giró su cabeza con cuidado y sonrió al ver a sus hijas.

—Mis pequeñas—Susurró Kate

Arianna trago saliva, sabía que la enfermedad gastaba todas las energías de su madre. Pues ahora se veía pálida, su cabello siempre estaba desarreglado, tenía ojeras debajo de aquellas largas pestañas y ojos azules.

—¿Como te sientes?—Pregunto Arianna

—Mejor ahora que están aquí—Kate sonrió—. Cuéntenme, ¿como les fue en su primer año?

—Si te soy sincera—Comenzó Pansy—, es la primera vez que veo a papá tan orgulloso de nosotras.

—¿Por qué?—Pregunto Kate

VIDEO GAMES; Theodore NottWhere stories live. Discover now