YO TE MEREZCO. [EDITANDO] #PGP2024

Capitulo 05.

«La caída de un buen amigo.»

Después de la masacre al pueblo ocurrido por un incendio causado por Suguru quien acabó con la vida de más de 100 personas, catapultó su destino como criminal asesinando también a sus padres. 

El 19 de septiembre del año 2007 fue el día en que el alumno de tercer año de la escuela Técnica de hechicería de Tokyo, Suguru Geto abandonó sus principios para darle paso al "usuario maldito" que estaría en la mira del mundo de la hechicería por los próximos diez años. 

El tic tac del reloj colgado sobre la pared lo hicieron entrar en aparente trance mientras observaba el cuerpo de su madre fallecida. Las gotas de sangre resbalaron por sus dedos hasta caer al suelo. Tenía la mirada perdida, como si ese no fuese él. Por su mente solo pasaban los momentos en que estuvo solo, encerrado, llorando, suplicando para que toda esa locura que se apoderaba de él desapareciera, pero nadie estuvo para ayudarlo. Tampoco le dijo nada a nadie. Su silencio marcó su destino, simplemente se le hizo difícil decirle a alguien, en especial a Satoru Gojo cuando se lo preguntó. Ahora todo estaba perdido. No había marcha atrás. 

Muchas veces había llorado en silencio en su habitación, nadie lo notó, ni siquiera sus padres que más bien solo cumplieron el papel de tutores a pesar de ver la apariencia de su hijo desaliñada y decaído.

El muchacho no conocía el sentimiento que se siente al recibir cariño, apoyo o  amor. No conocía el lazo de un hijo con su madre, la maternidad ni la paternidad. Por fuera era todo lo que un buen chico debía ser, pero por dentro estaba gritando.

Después de platicar con Shoko caminó por las calles en medio de una masa de personas hasta que escuchó la voz del único amigo que sí lo consideró un "amigo" frente al local de KFC.

—Ahora explícate, Suguru... —el tono de su voz era para recriminarle sobre sus acciones.

Suguru ahora comenzó a dejar su cabello suelto y sólo la parte superior de éste la recogió en un rodete dejando la parte inferior suelta conservando el característico flequillo. Sin darse vuelta respondió con sarcasmo y sin remordimientos.

—¿Qué no... ya te lo contó Shoko? —movió su cabeza un poco hacia el lado izquierdo aún dándole la espalda—No es nada más ni nada menos de lo que te dijo.

Satoru tomó esto como una provocación y se frustró al instante—. ¿Y tus padres?—cuestionó inmediatamente muy enojado.

—El hecho de que fueran mis padres no los hacía especiales—, respondió con total indiferencia—. Además mi familia ya no son solo ellos.

—Eso no es lo que estoy preguntando—, la rabia y la frustración crecían con cada palabra que salía de la boca de Suguru.

—Tengo mis razones, y hay un punto— respondió este con total indiferencia—. Es por un bien mayor.