El nacimiento de la oscuridad

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El viento helado de la noche soplaba a través de las desoladas calles de la ciudad, susurrando secretos oscuros que solo los pocos insomnes que vagaban por las sombras serían testigos, en el centro de una pequeña ciudad había un laboratorio de la antigua corporación Smart Brain, ahí dentro se encontraba un grupo de científicos que estaban experimentando con una pila de "cenizas" que eran los restos de un Orphnoch que había muerto hace ya varios años frente al cinturón de Kaixa, cuando experimentaban un rayo salió de una de las computadoras que estaban usando para poder ver el estado del experimento, cuando las cenizas salieron volando por una ventana que estaba abierta pero cuando esos científicos miraron la mesa se encontraba una persona cubierta en gris, estaba totalmente sucio de los restos de cenizas entonces cuando uno de los científicos fue a tomar su pulso lo sujetó del cuello hasta romperlo para tomar su ropa y dejar su cuerpo en la mesa. los demás científicos vieron de nuevo a la mesa solo estaba su compañero muerto y una persona terminando de vestirse, entonces los vio fijamente.
Donde estoy —dijo aquella persona con una voz sin emociones dado que acaba de volver de la muerte, su mirada reflejaba odio junto con indiferencia, entonces decidieron darle la información que pidió,— Está en un laboratorio de Smart Brain en la ciudad de Takayama —aquel hombre temeroso de que el resucitado orphnoch lo atacara se alejo de él lo más rápido que pudo, cuando aquel hombre se movió de la habitación que estaba rompió una puerta de madera que había para prohibir el pasó. cuando aquél hombre estaba por irse del lugar uno de los sobrevivientes del experimento le ofreció darle todo lo que necesitara a cambio de que él los ayudara a poder cumplir con sus objetivos.
ese hombre aún sucio de cenizas aceptó ayudarlos con una condición, exigía un driver para poder cumplir sus peticiones, aquellos hombres aceptaron con un poco de duda, no tenían mucho que pudieran hacer, ese monstruo renacido era más fuerte que ellos y no sabían de que sería capaz con eso pero debían hacerlo porque no parecía mentirles. Entonces con todo eso pensado empezaron con el diseño y creación, meses después de ese suceso por fin estaba el driver listo.
Lo entregaron junto con un pequeño artefacto azul que tenía un botón, cuando se puso su driver en la muñeca se escuchó como se ajustaba a su cuerpo. Entonces con el driver ya puesto  presionó el botón mientras una pequeña luz azul se extendía en la habitación— Henshin —fue lo que dijo antes de ser cubierto por un traje negro con una mascará gris que tenía un diseño de un ojo en medio además de una especie de armadura negra que tenía un ojo en medio, luego fue cubierto por una capa negra con bordes azules y un lente redondo en su cabeza que portaba un cuerno azul, su brazo izquierdo portaba el driver que tenía la pequeña esfera brillante.
Bien, que debo hacer primero? —fue lo que dijo ya transformado portando el manto de un Kamen Rider,— No debería tener un nombre? —fue lo que dijo uno de los científicos. El nombre del driver es Dark Necrom Blue, entonces te llamaremos así— dijo el científico mientras que le daba una hoja de papel con una lista de nombres y materiales. —Aquí está todo lo que necesitamos y de donde, por favor traelo— entonces se fue rápidamente por la puerta desapareciendo en la oscuridad de esa bella noche, aquel pueblo no tenía muchas farolas por lo que estaba bien camuflado, la única que podría ser testigo de sus actos era la luna. quien estaba totalmente descubierta y llena. bajo esa brillante luz blanca rompió la ventana de una tienda de tecnología donde entró para robar un par de aparatos, cuando al día siguiente vieron las cámaras de seguridad no había nadie en las grabaciones por lo que se pensó que solo fue vandalismo para romper la ventana.
Cuando todo parecía normal la ciudad sufrió una ola de robos y desapariciones, cuando todos las personas de ahí empezaron a tener miedo, toda esa ola de terror por fin había parado, pero de repente aparecieron monstruos que parecían híbridos entre animales y humanos que asesinaban a las personas que se les pasaran por enfrente, esas bestias se llamaban orphnochs, hace años se habían escuchado rumores sobre ellos pero nadie pensaba que fueran reales. desgraciadamente para las personas de esa ciudad esos cuentos infantiles se volvieron reales, cosa que les causó un gran problema siendo que no podrían volver a vivir como antes, pero cuando esos rumores llegaron hasta la ciudad de Tokio dos personas tomaron un par de maletines que pusieron en sus motocicletas y tomaron rumbo hacía aquel pequeño pueblo de terror donde estaban sufriendo de forma brutal, todos se conocían entre si y ahora era probable que uno de tus amigos o familia estén apunto de matarte o tu ser el que matará a un ser querido, cosa que les dejó un trauma a la mayoría de personas, ni los niños pequeños o personas de la tercera edad lograron salvarse de la muerte o de volverse uno de esos orphnochs que estaban atormentando la ciudad, cuando aquellas personas llegaron con sus motocicletas, lo primero que vieron cuando llegaron fue que la ciudad estaba totalmente vacía, mientras caminaban por la ciudad no había nada ni nadie en los alrededores. Las calles estaban totalmente desiertas y  no había ningún lugar abierto, ya era bastante tarde pero no era muy noche, apenas eran las sietes de la tarde, era una cálida tarde de verano y esa ciudad estaba en un estado como si fueran las cuatro de la mañana en invierno, cuando una persona los vio caminar saliendo de su casa con miedo para así darles una advertencia —No deberían estar aquí a esta hora, regresen a sus casas por su bien— después de esa advertencia que parecía ser más que nada para asustar, aunque cuando se escuchó algo en las sombras ese ciudadano se metió en su casa con velocidad dejando solo a los forasteros.
—Yuji, es momento de hacer esto, porque no estamos seguros fuera.
—Ni lo digas, Inui, es el momento de usarlos.
Cuando dijo eso ambos tomaron los maletines y sacaron dos cinturones de ellos que se pusieron a la vez mientras que de las sombras emergía una figura gigante con una mirada brillante también había alguien que los observaba desde la altura.
—Henshin! —gritaron a la vez luego de poner una secuencia numérica en dos teléfonos que pusieron en los cinturones siendo cubiertos por brillantes luces amarillas y rojas, mostrando así a los dos héroes de esa ciudad, Kamen Rider Faiz y Kamen Rider Kaixa. Ahora la figura de la altura los veía con interés en ellos, una sonrisa se posó en la cara de aquel siniestro ser que observaba todo como un titiritero viendo su juego, que entonces se sentó como si fuera un niño pequeño viendo su serie favorita.
Por lo que ambos Riders empezaron una fuerte pelea contra aquel Orphnoch, esa batalla fue de tal magnitud que todos los ciudadanos se quedaron viendo como el ser de terror había sido reducido a cenizas. todos salieron felices de sus casas mientras que aquel ser en la altura se ponía de pie y camina lejos de ahí presionando aquella esfera azul, que tenía con él desde hace meses. Después de que Takumi y Kiba salvaron la ciudad por esa noche el pueblo los nombró como sus salvadores por lo que decidieron quedarse en la ciudad durante un tiempo, al final no tenían nada que los espere en Tokio, sus amigos tenían sus vidas y ellos seguían juntos cuidando la lavandería de su amigo que ahora era un padre de familia de una orphnoch que logró tener un hijo, juntos trabajaban y vivían juntos mientras guardaban sus cinturones para una situación como esta, entonces aprovecharon la oportunidad, aún había un cinturón más por ahí que tenía otro de sus amigos, uno que estaba trabajando en un orfanato como el que vivió de joven, así que aún faltaba otro Rider por aparecer, con esa noche habiendo salvado a las personas decidieron quedarse en una pequeña cabaña vacía por el tiempo que estén ahí acabando con los orphnochs. 

"Kamen Rider 555: Oscuridad Renacidaजहाँ कहानियाँ रहती हैं। अभी खोजें