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—Taehyung, ¿Estás seguro de esto? —el chico preguntó con la voz temblorosa manteniendo sus manos pegadas al vidrio de la ventana del auto, mientras se reflejaba en su rostro el tono rojo del letrero led.

—Jungkook, ¿Tienes miedo? —sonrió ladino hacia la reacción de su mejor amigo que temblaba como un pequeño y suave conejito.

—¿Miedo? —Jeon río falsamente a esa pregunta, para después mirarlo aún con las manos pegadas al vidrio—. Tengo terror, estúpido—. Insultó casi al borde del llanto.

—Tranquilo, te he traído para que dejes toda esa... —se interrumpió a si mismo cuando no sabía como describir la actitud tan tímida de su mejor amigo.

—¿Esa qué? —lo miró amenazante.

Porque así como era tímido, también era un musculoso que te podía partir la cara en cualquier segundo.

—Esa actitud de niño que no mata ni a una mosca, pero bien que se la jala con vídeos porno —el azabache lo golpeó en su hombro tan fuerte que Taehyung detuvo sus palabras en un instante y se dedicó a quejarse del dolor arrimado a la puerta.

—Voy a entrar —decidió en tan solo unos microsegundos y abrió la puerta del auto dispuesto a bajarse.

Su amigo sonrió aún dentro del auto con satisfacción de poder visualizar como Jeon Jungkook, un chico de veintitrés años estaba parado frente a un bar con las piernas hechas gelatina.

Cualquier hombre a esa edad tendría la suficiente madurez para estar tranquilo y emocionado de venir a un lugar como este, pero para el pelinegro era toda una experiencia, pues estaba acostumbrado a estar en su jaula, salir a lo necesario y pasar horas y horas en libros que alimentaban su conocimiento sobre, política, filosofía, ética, pero nunca leyó uno en donde le explicaran ciertos "temas".

En ese "ámbito", Jungkook carecía de sabiduría, y solo se conformaba con las pequeñas cosas que le decía su amigo, pues el castaño no iba a dar hasta el más mínimo detalle, porque era un poco... Incómodo tener que explicarle a un hombre "cuando, por qué y como el pene se te endurece" o "como aliviar el dolor después de que se te endurece".

Taehyung jamás podría explicarle con tanto detalle, pero el conejito se las arregló para aprender y cada vez que le sucedía tal "desgracia", como él suele decirle, se masturbaba con el mil único video porno que Kim había bajado en su computador.

Siendo tan inocente, sin siquiera rozar con los dedos el cuerpo de una chica, ahora se encontraba frente a un bar.

Pero el punto es que no es cualquier bar.

Es un lugar donde hay strippers, y chicas que todo tipo de trabajo "premiun", Taehyung quería que Jeon sacara de su billetera un buen fajo de billetes y perdiera esa virginidad de una vez por todas.

Porque Kim pensaba:

¿Cómo Jungkook puede seguir viviendo sin haberla metido ni una sola vez?

Y vaya que yo también me pregunto lo mismo.

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—¡Oye, ¿no está como muy alta la música?! —preguntó en un grito cerca de la oreja de Taehyung.

—¡No, está bien! —le hizo saber con una sonrisa en el rostro.

—¡Tae, no está bien estar con la música tan fuerte, según estudios puede afectar el oído en un...!

—¡Wuju, Bunny! —el castaño ignoró por completo a su amigo cuando apareció la chica más deseada de todo el lugar.

Levantó los brazos contento y dejó literalmente solo a Jungkook, quien estaba tan asustado que no entendía porqué todos se iban tan cerca del escenario.

Virgin [Reverso] [J.Jk] - [Finalizada]Where stories live. Discover now