𝟎𝟎𝟏: purpose

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PURPOSE  
CHAPTER ONE

PURPOSE   CHAPTER ONE

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TRES AÑOS DESPUÉS...

LOS RECUERDOS DE SU tiempo pasado antes de su llegada a Oldtown no eran más que una neblina distante, y Viserra Targaryen estaba agradecida por eso.

Cuando regresó a Desembarco del Rey, su madre la reconoció apenas. Viserra ahora se movía con gracia y autoridad. Su postura era más recta, su voz más suave, pero sus ojos de ciervo se volvieron fríos — tal vez más que los de su madre.

Aegon había cambiado más de lo que la mente de Viserra podía comprender. Se puso más alto y su cabello creció hasta ser del mismo largo que el de ella, un poco más corto, pero aún más largo de lo que ella lo había recordado. Sus ojos todavía se distraían alrededor, pero ya no para las sirvientas. Parecían encontrarla más interesante que antes.

Su abuelo la había preparado para cuando sus ojos se encontraran con los de Aegon una vez más. Ella tenía que sonreír, agitar sus pestañas y girar su cabello. Ella se haría tímida y, eventualmente, él no podría distinguir sus deseos de los suyos

Cuando los dos caminaron por los jardines, con los brazos entrelazados, Viserra se aseguró de que todos presenciaran su presencia. Y cuando se separaron al anochecer, ella se aseguró de que él expresara sus deseos en voz alta —sabiendo que los espías permanecían en las grietas de la sombra de la Fortaleza Roja. Al final de esto, cualquier duda que descansaba sobre su compromiso, había desaparecido.

Solo pasaron unas semanas antes de que Aegon estuviera profundamente enamorado de ella, o más bien, de lo que ella tenía para ofrecerle la noche en que se casaron. Viserra no era tonta, notó sus ojos maravillados en ella —en sus labios. Pero sus manos no dijeron mentiras mientras sostenían las suyas y su boca corría como un río de verdad.

Ella notó cómo sus labios se suavizaron cuando se encontraron con los suyos, y notó cómo se volvieron ásperos cuando se encontraron bajo la luz de la luna en sus aposentos. Viserra notó cada detalle del afecto que le dio y lo repitió en su mente para quedarse dormida

Se convenció a sí misma de que era justo lo que haría una esposa obediente. La palabra se sentía agria en su boca, pero era dulce en la suya. Más dulce que el Arbor Gold que ella probó en su boca cuando se inclinó para besarla. Con solo unas pocas semanas más hasta que se casaran, Viserra ya había asegurado un lugar a su lado. Aún así, la presión que su abuelo había ejercido sobre ella era pesada. Y pronto Viserra se encontraría enterrada debajo de todo.

Los días que la pareja pasaba junta sola llegó a su fin. Para asegurarse de que su virtud estaba asegurada — en parte porque Alicent no confiaba en Aegon — Viserra siempre fue seguida por un joven caballero.

El caballero, para su sorpresa, era solo dos años mayor que ella —seis y diez. Marcyl era el nombre que le dio su madre, y Flowers porque el estado de su nacimiento no era el de un lord

   —Es un bastardo —, le susurró Aegon mientras los dos se arrodillaban en los escalones acolchados dentro del Gran Septo. Aunque el príncipe no estaba muy entrelazado con la Fe de los Siete, todavía acompañaba a Viserra al lugar sagrado.

Viserra se volvió hacia él, con los dedos entrelazados. —Es un caballero —, corrigió. —He visto la forma en que empuña una espada...  casi como si hubiera entrenado para matar desde su nacimiento —.

No tuvo respuesta para ella, solo se volvió hacia el caballero que estaba a unos metros de distancia, sin decir una palabra. Parecía que eso era todo lo que Aegon hacía cada vez que Viserra defendía al caballero.

—Creo que le gustas —, murmuró amargamente.

Viserra sintió que sus labios se curvaban, ligeramente. Ella se rió entre dientes en su garganta. —¿Te molesta? — Su voz era apenas audible. Ser Marcyl era guapo, pero ella no lo admitía en voz alta. —¿Que tal vez podría sentir algo por mí?  —

—Sí —, Aegon se mordió el interior de la mejilla.

—No debería. Debo casarme contigo, no con él —. Sus palabras corrieron con un final amargo, pero para Aegon, solo el pensamiento de sus dulces labios en los suyos los hizo sonar como miel. —Voy a dar a luz a tus hijos —, como se me recuerda únicamente, pensó. —Solo soy tuya, Aegon —.

Y sin embargo...

Sintió como si él fuera el que le pertenecía





Sintió como si él fuera el que le pertenecía

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TRADUCTOR NOTES¡!

Dios mío, finalmente terminé de escribir el primer capítulo. Quería asegurarme de que todos tuvieran una idea de cómo continuará el resto del libro.

Siento que pueden entender los motivos y personalidad de Viserra.

También quería asegurarme de incluir los pensamientos de Aegon y cómo lentamente está empezando a ser manipulado por ella??? No estoy segura de si hice un buen trabajo explicando eso ... Pero al menos ahora conocen sus antecedentes juntos.

Por cierto, los capítulos de este acto están dedicados a mostrar cómo son las cosas antes de que comience la trama del show

our lady of sorrows ━━━ aegon and aemond targaryenWhere stories live. Discover now