Capítulo 16

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AURA

Existió una época en que no me gustaban los domingos, son días demasiado... familiares.

Mi relación con mamá y mi hermana ha mejorado en los últimos años, pero antes era cualquier cosa menos buena. Luego llegó León con su tortura emocional y aprendí a vivir con ansiedad cada minuto lejos de él, no sabía qué podría estar haciendo... o con quién. Dimas no mejoró el asunto, lo empeoró. Y, entonces, llegó Eric a corregir todo lo que estuvo mal en mi vida.

Ya sé que no es correcto depositar en alguien la responsabilidad de cambiar nuestra vida, pero Eric ha hecho eso con la mía. Y ahora siento horrible por no poder compartir ese agradable día de playa con él, sino con el trabajo.

—¿No podían rentar una casa más apartada? No sé, a unos setenta kilómetros de la civilización —suelta Milo con tono sarcástico mientras conduce mi camioneta por la carretera—. Por Dios, Aura, ¿quién fue el genio que rentó la casa?

—Me parece que el asistente de Luca, pero no es rentada, es de un producto de cine o algo así —contesto mientras saco una galleta del empaque para Rachelle, Rik se ha dormido en su asiento para niños.

—¡Playa! —exclama mi hija.

—No grites, amor, tu hermano está durmiendo —musito.

Rachelle pone un dedo sobre sus labios y ríe en silencio, luego come su galleta.

—¿Estás segura de que compraste todo en la última tienda? Porque dudo mucho que encontremos otro sitio abierto... o siquiera a algún ser humano.

—No exageres, Milo —rio por lo bajo—. Compramos todo, tranquilo.

Milo respira hondo.

—Al menos espero sacar unas buenas fotografías para las redes sociales... Mi Community manager me dijo que necesito más material.

—Ya verás que sí —Propino un golpecito amistoso en su hombro—. Eric me ha enseñado un poco más de fotografía.

—Bien.

Contemplo el perfil de Milo. Henrik no miente cuando se refiere a él como una criatura exótica, lo es. Su cabello blondo castaño claro con brillos rubios se ve más claro con el sol que azota la carretera. La piel bronceada es preciosa y hace resaltar sus ojos verdes; ni qué decir de sus tatuajes, son ese «plus» que lo ha convertido en un modelo que debe tener un Community manager para sus redes sociales.

Tal vez, si me va bien con la serie, podría contratar también a alguien para ayudarme con mi presencia en internet. Los chicos tienen un equipo completo que maneja sus redes sociales, aunque ellos igual publican algunas fotografías y comentarios por su cuenta.

Avanzamos unos minutos más por la carretera justo por detrás del automóvil rentado de Luca. El ronquido de Rachelle me avisa que también se ha dormido. Estaban tan emocionados con venir a la playa que casi no durmieron, por lo tanto yo tampoco.

Emito un enorme bostezo que hace reír a Milo.

—Perdón, esto de ser madre es agotador.

—Lo sé —suspira hondo—. Mi hija también es muy activa.

Intercambiamos una sonrisa y agrega:

»¿Hablaste con Eric?

—Un poquito, estaba por abordar el avión... Se escuchaba cansado.

—¿En serio duerme mal cuando no está contigo?

—Sí...

—Qué cursis —ríe.

La melodía de AuricWhere stories live. Discover now