¿Te sientes bien querido? ¿Te sientes más feliz?.

Una sonrisa maliciosa se curvó en mi rostro.

Él con sus manos temblorosas levantó un poco su camisa mostrando algunas cicatrices.

— Antes de ti, yo era el objeto de bullying de Matt — Él cerró sus ojos y suspiró. Quité un poco la presión para dejar que hablara, asentí — Cuando llegué al colegio él estaba solo, siempre se encontraba solo... Yo intenté acercarme ya que mis padres siempre me decían que debía hacer amigos, que aquellos que se encuentran solos siempre necesitan una ayuda o no son lo suficientemente buenos para socializar como para dar el primer paso... Me acerqué y todo empezó bien, charlamos por horas y en el receso siempre compartíamos nuestro desayuno, jugábamos compartiendo nuestros juguetes y siempre nos sentábamos juntos, él era mi amigo... Podíamos reírnos cada día sin pensar en nada más... Incluso los regaños de la maestra se volvían causa de carcajadas entre nosotros — Él sonrió con nostalgia — Pero día a día todo iba tornándose diferente... Él comenzó a tratar temas muy oscuros y sangrientos, poco a poco se fue acostumbrando a solo hablar de sangre y métodos de tortura. Un día me llevó detrás del colegio con la excusa de que había algo sumamente interesante allí... Sin razón aparente me golpeó directamente al estómago dejándome sin aire "A partir de hoy tú serás mi juguete" me dijo. Yo era débil, demasiado y por eso no podía defenderme de sus golpes y malos tratos, eso estuvo así por un año, hasta que decidió dejarme y buscar otra víctima —

— Allí aparecí yo — Dije con voz arisca y malhumorada.

Él desvío la mirada.

— Si — Dijo neutral.

Estampé su cabeza contra la pared aún más fuerte que antes.

— ¿Yo merecía eso? — La molestia clara en mi voz.

— No... Pero...  —

Quité mi pie de su rostro y lo tomé por el cabello, lo levanté y lo puse a mi altura.

— Entonces porqué me tomaron como su maldito juguete de torturas — Dije tajante — ¿Sabes el número de mentiras que les dije a mis padres para ocultar sus maltratos? ¿Tienes idea del miedo que tenía? ¿El dolor? ¿¡Lo sabes!? — Lo golpeé tres veces seguidas.

El chillaba de dolor en el piso.

Una notificación en mi celular desvío mi atención.

Mike: Oooooh amigo, ésta fiesta es una locura, Neithan acaba de vomitar... Hablando de vomitar ¿Donde estas?.

¿Me dijo vómito?.

Yo: ¿Acabas de insultarme?

Yo: Bueno, no importa...

Yo: Estoy en la tercera habitación del segundo piso, necesito que vengas.

— Ahora vas a ver todo el sufrimiento que yo pasé — Puse mi pie sobre su abdomen y ejercí toda la fuerza que pude. Él no tardó en toser y notablemente quedarse sin aire.

Levanté mi pie, él respiro y lentamente se calmó.

Repetí mi acción causando la misma reacción.

— ¿No estás siendo muy duro? — Dijo Adison con voz apagada.

Me acerqué a ella.

— Deberías irte, no quiero que veas esto — Acaricié su cabello.

Ella limpió unas gotas de sangre de mi mejilla.

Efímero [1]Where stories live. Discover now