El mes que me cambió la vida

La cita

Me dio una pequeña caja cuadrada y la abrí. Dentro había una pulsera de perlas muy bonita.

-Muchísimas gracias Luke, no hacía falta, seguro que te has gastado un dineral para poder comprarme esto.

-No hay de qué guapa, el dinero es lo de menos, solo quería hacerle un regalo a mi preciosa novia.

-Jo, pues muchas gracias -Le dije dándole un beso en la mejilla.

Cuando terminamos de comer fuimos a dar un paseo por París y nos comimos un par de helados, de vainilla y fresa.

Estuvimos juntos toda la tarde. También cenamos juntos porque no queríamos irnos así que compramos una pizza para los dos. Cuando nos la terminamos fuimos a la torre Eiffel hasta que llegó la hora de tener que irnos, ya que, era bastante tarde.

-Bueno, me tengo que ir Luke, lo siento, es bastante tarde -Le dije.

-Sí yo también, buenas noches Madelyne.

-Buenas noches -Dije yo dándome la vuelta para irme y deseando que me diera un beso.

-Madelyne -Me dijo cogiéndome del brazo.

-¿Sí?

-Te quiero -Me dijo acercándose cada vez más mi.

Hasta que llegó ese punto, me besó, y yo le seguí el beso, fue todo precioso, como en una película romántica. Mi primer beso con Luke en la torre Eiffel, bajo la luz de la luna, fue perfecto.

Después de todo, nos fuimos cada uno a nuestra casa. Yo camine sin poder dejar de pensar en el beso con Luke, cuando de pronto, escuché a mi móvil sonar. Como no, era Chloe.

Chat con Chloe

Chloe: Madelyne ¿Que tal tu cita con Luke?

Yo: Bastante bien, no ha estado mal.

Chloe: ¿Me lo dices enserio? Tía, acabáis de daros vuestro primer beso y dices que no ha estado mal.

Yo: Bueno, he de admitir que ha estado genial.
Yo: Te voy a ir dejando que ya casi llego a mi casa, buenas noches Chloe.

Chloe: Buenas noches Madelyne.

Final de chat con Chloe

¿En serio hace cinco minutos de lo del beso y ya lo sabe? Se entera siempre de todo.

Entré a mi casa en silencio y me quité los zapatos, acto seguido subí a mi habitación y me preparé para dormir. Me costó dormirme, aún no podía creerme lo que había pasado con Luke, pero, finalmente, me dormí.

Eran las nueve y media de la mañana, me acababa de despertar, y ya solo faltaba una semana para que comenzase la competición de esgrima. El resto de la semana había estado practicando muchísimo, y me sentía bastante segura, pero aún así seguiré yendo a practicar todos los días hasta que llegue el momento. Quedé con Luke las mayorías de las tardes, y algunas veces venía Chloe a mi casa a cenar, o a comer, y le contaba que tal iba todo. Les conté a mis padres la situación con Luke y tal, y como la mayoría de veces me apoyaron en mis decisiones. También estuve hablando con Margarett pidiendole consejos ya que es mayor que yo y ella ha pasado ya por todo lo que estoy pasando yo.

Hoy me tocaba más prácticas así que como llevaba haciendo estos últimos días, me preparé, y me fui andando hacia la academia, de nuevo entre en el baño, me cambié, cogí mi espada y salí de allí. Allí estaba Max esta vez decidí saludarle para no parecer maleducada.

- Buenos Días -le dije

- Hola -Me dijo poniendo los ojos en blanco.

Me fuí a mi sitio, y continué prácticando.

- Sabes lo de nuestras familias, ¿verdad? - me preguntó

- Emm.. si -le dije

-Pues hazlo más fácil para los dos y no me hables, los dos sabemos lo que queremos hacer, aquí, ganar. -me soltó

- Vale -le dije

¿En serio me acababa de decir eso?

Al final lo acabé ignorando el resto de tiempo que estuve allí practicando, salí de allí, ya casi era la hora de comer, me dirigí hacia mi casa y cuando llegue les conté a mis padres lo que había sucedido, no era por ser chivata ni nada pero se lo conté para que me ayudasen a saber que hacer en esa situación.

- Yo creo que lo mejor que podrías hacer es pasar de él Madelyne, tu eres una gran chica, confiamos en ti. - me dijo mi abuela

- Gracias por el consejo abuela, te quiero - le dije

- Yo a ti más, alma mia- me dijo dandome un abrazo.

Después comimos todos en familia y poco después subía hacia mi habitación y llame a Chloe y estuvimos hablando, un rato.

- Oye mis padres van a estar fuera este fin de semana y voy a hacer una fiesta, ¿Puedes venir? -me dijo por llamada

- ¿Cuando es?- pregunté

- Mañana, ¿Vendrías? Porfa -me preguntó

- ¿Luke va?- pregunté

- Sí, si va- me respondió

- Venga vale, pero si me ayudas a prepararme, soy nueva en esto de las fiestas. - le dije

- ¡Hecho! -exclamó muy excitada.

- Valee, entonces nos vemos mañana -le dije

- Perfe -me dijo mientras finalizaba la llamada.