𝐅𝐋𝐎𝐑 𝐃𝐄 𝐂𝐄𝐑𝐄𝐙𝐎 [Roier X Tú]✓

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Al día siguiente todas las fotos que nos habían tomado estaban en tendencia

Me levanté bastante feliz, fuí a dejarle comida a Mushu en su plato y desayuné un poco de fruta. Miraba mi celular para seguir revisando las opiniones de los fans

"Yo sabía que ellos no habían terminado, solo fué un problema de novios"

"Ellos son mi nueva definición de amor"

"WEEEEY Y TODOS FUNANDO A MULAN, QUEDARON 🤡"

"Por eso decía, DEFENDERÉ A MULÁN CON MI VIDA"

La mayoría eran comentarios positivos aunque siempre existía el tonto que criticaba, decían que no tenía sentido que hayamos regresado despues de que él no saliera a defenderme de la funa que sus mismos seguidores me hacían

Acabé de desayunar, fuí a cambiarme, estuve lista y justo escuché el timbre, fuí a abrir solo para encontrar a un repartidor

—Paquete para _____.— dijo dandomelo, supuse que era mi cable —Firme por favor.—

Me pasó una hoja y su bolígrafo, yo firmé

—Gracias.— exclamé devolviendoselo y entrando de nuevo a mi casa para cerrar la puerta

Dejé la caja sobre la mesa y la empecé a abrir.

Ví que habían bastantes cositas, pero no eran para mí, eran para Mushu

—¿Qué es esto?.— me cuestioné sacando cosa a cosa, era ropita para él y algunos juguetes —¡Wilifredo!.—

El perro no aparecía y por fin lo recordé ¡El veterinario!, incluso le había dejado comida aunque no estaba

Tomé mi bolso y salí corriendo, tenía que haber pasado por él a primera hora.

Dí la vuelta en la esquina con la esperanza de encontrar algún taxi pero mi mirada se iluminó al ver a Roier regresar con Mushu

—¿A dónde ibas?.— cuestionó riendo cuando se acercó a mí

—Dame a Wilifredo.— exclamé y él me pasó la correa

—Ayer cuando llegué a mi casa estuve comprando cosas que ví en internet.— contó —¿Te llegó el paquete?.—

—¿Ahora quieres ser el padre responsable de Wilifredo?.— pregunté

—De Wilifredo no, de Mushu si.— dijo burlón

Reí y me despedí con un movimiento de mano, tenía que volver a esperar que llegara mi cable

Caminé unos cuantos pasos hasta darme cuenta que estaba siendo seguida por él

—¿Ya desayunaste?.— preguntó a mis espaldas, ni siquiera me giré

—Ya.— respondí

—¿Llegó tu cable?.— seguimos avanzando

—No.— me limité a decir

—Hagamos un directo juntos.— ofreció y me detuve para mirarlo —Ya todos saben que tenemos algo, por favor.—