One Shots Miguel O'hara

Precio?

Abres las puertas de la oficina de Miguel, entras tranquilamente, Miguel te oye entrar, no lo demuestra. Continúa mirando fijamente los monitores, sin prestar atención a nada más a su alrededor. Después de lo que pareció una eternidad, contigo parada allí sintiéndote un poco incómodo sin ser reconocido, Miguel habla.

Miguel: Sí, estoy bastante ocupado en este momento, así que si puedes volver más tarde. O mejor aún, no vuelvas en absoluto.

t/n: Perdón por molestar, digo en un tono sarcastico, solo te quería preguntar algo sobre los relojes transportadores, no tienes que actuar como una idiota siempre (digo entre dientes)

Miguel O'hara levanta su vista del monitor y frunce el ceño con molestia.Lo que sea que tengas que preguntar, que sea rápido. No tengo tiempo para tus tonterías.

t/n: Me acerco a Miguel y en un tono muy bajo digo , que tan malo es si perdí mi reloj ?

Miguel se inclina hacia ti, con una sonrisa predadora cruzándole el rostro.Así que has perdido tu reloj transportador, ¿eh? Muy mal. Realmente mal hecho. Sabes lo que eso significa, ¿verdad? Sin un reloj transportador, no puedes volver a tu dimensión. Al menos, no sin mi ayuda. Inclina su cabeza hacia ti mientras deja escapar un gruñido bajo.Y será un precio alto que tendrás que pagar.

t/n: pues no es como que tenga mucho dinero ahora, pero puedo conseguirlo, talvez , exactamente de que cantidad hablamos?

Miguel O'hara se acerca aún más a ti, su aliento cálido en tu cuello. 

El precio variará, dependiendo de lo que esté dispuesto a ofrecer. A veces puede ser dinero, otras veces puede ser algo más... valioso. Pero lo que sea que ofrezcas, asegúrate de que sea suficiente para mí.

Miguel se detiene por un momento y, con una sonrisa perversa, susurra otra cosa en tu oído.

O tal vez, solo tal vez, podrías ofrecer algo más... interesante. ¿Qué tal si pones tu cuerpo donde están tus palabras? ¿Qué dirías de eso?

t/n: retrocedo un paso, me rio de lo que me dijo miguel, oye tranquilo, hace unos segundos dijiste que ni siquiera me querias  ver y ahora resulta que harias algo más conmigo?

Miguel te mira con una mezcla de ira y deseo mientras se acerca lentamente a ti.

No te confundas, niña tonta. No me confundo acerca de mi desprecio por ti. Pero eso no significa que no pueda disfrutar de tus atributos en el proceso. Y tú sabes bien que me quieres tanto como yo te quiero a ti.

Con una sonrisa depredadora en su rostro, Miguel coloca una mano en tu cintura y te tira hacia su cuerpo.

Y si crees que puedes jugar conmigo como si fuera un juego, prepárate para las consecuencias.

t/n: Oye, (le quito la mano de mi cintura), que te hace creer que me gustas ?

Miguel O'hara se encoge de hombros, pero aún mantiene sus ojos fijos en ti.

No me equivoco en mis juicios, Y sé que sientes lo mismo que yo.

Con una sonrisa oscura en su rostro, Miguel se acerca más a ti, susurrando con voz grave y suave.

No tienes que negarlo, cariño. Solo déjate llevar y verás dónde nos lleva esto.

t/n:( Lo miro fijamente, miguel me parece bastante atractivo y mas enojado, me sonrojo y me doy vuelta, me pongo nerviosa pero no quiero que lo note)

Miguel te sigue con la mirada mientras te das la vuelta, notando el rubor en tus mejillas.Vamos, mocosa. ¿Por qué te alejas? No tengas miedo de tus deseos.

Con un gesto rápido, Miguel te agarra el brazo y te gira hacia él, atrayéndote hacia su cuerpo una vez más.Admite que me quieres, admite que te hago sentir cosas que nadie más puede. ¿No te gustaría saber lo que se siente estar con alguien fuerte y apasionado como yo?

t/n: (no me quiero dejar llevar, pero no hago nada para evitarlo)

Miguel te besa con fuerza y ​​pasión, haciéndote sentir como si te estuvieras derritiendo bajo su toque. Cuanto más intentas alejarte, más fuerte te sostienes, alardeando su increíble fuerza.

Cuando finalmente se separa de ti, te mira con ojos ardientes, clavando sus garras en tus hombros.

¿Lo ves, cariño? ¿Ves lo que te he estado diciendo todo este tiempo? Somos perfectos el uno para el otro.

Con una sonrisa satisfecha en su rostro, Miguel te suelta y te da un paso atrás.

Ahora, si me disculpo, tengo mucho trabajo que hacer. Pero no te preocupes, continuaremos esto la próxima vez que nos encontremos en privado.

t/n: (odio lo que acaba de hacer, pero a la vez necesito más de el) Salgo de la oficina, pensare en sie s un precio justo o no vale arriesgarme.