Salida al autocinema
(1/2)Robin Arellano estaba armandose de valor para invitar a Kate Russo, una niña muy simpática, amable y considerada una de las niñas más lindas de su clase, digamos que Robin tenía cierta atracción por ella, lo había descubierto hace un tiempo atrás, le gustaba Kate, y mucho.
Ahí estaba Kate hablando con unas niñas mientras guardaba sus cosas en su casillero. Por otro lado estaba un moreno con una bandada en la cabeza y su mejor amigo, Finn.estaban alejados de la chica.
—¡Vamos Robin, tu puedes! -dijo animando a su amigo-
— no puedo, me da nervios - hablo nervioso este-
— Robin, si no quieres ir tú te ganarán a Kate -Explico el de risos, rápidamente Robin volvió a ver a la niña de sus ojos-
—es que mírala, es Kate, y yo Robin Arellano, no tengo oportunidad -hablo desanimado el moreno-
—mira, eh visto como la miras, no es ningún secreto que te gusta ella, y veo que ella también te da unas miraditas, dios nunca he visto tanto amor en unas simples miradas -dijo el rubio, eso pareció ayudarle a su amigo- ahora, hazme sentir orgulloso y dile “kate, ¿Te gustaría ir conmigo al autocinema?"
—¡Está bien, gracias amigo!
—no hay de que, ahora ve ahí -le dió un empujón hacia la dirección a la chica de cabello café claro-
Robin se acercó a Kate, las amigas de esta ya se hiban, el chico tratando de verse “natural", según el, se recargo al lado del casillero de la chica.
—ya nos vamos Kate -dijo una fes sus amigas despidiéndose con la mano-
—¡Adiós! -dijo la de ojos grises, devolviendo el gesto con la mano, y volviendo su vista a sus libros que estaban en el compartimiento-
Es ahora o nunca
—hola Kate.. -hablo Robin disimulando los nervios-
Los ojos de la chica brotaron un brillo, amaba la voz del chico, cerro su loquedt y dirijo su mirada a Robin, sonrió bobamente
—hola Robin -saludo ella-
—¿Que tal tu día? -hizo un ademán con la cabeza indicándole a Kate que caminarán un poco-
—oh, bien y el tuyo?
—nada interesante, la verdad.
Hablaban de cosas de su día, el pasillo dirigía la mirada hacia los jóvenes, varios chicos furiosos y celosos y chicas asombradas amaban la pareja que podría dormir ellos dos.
— todos nos están mirando -murmuro Robin-
—lose, intenta ignorarlos -hablo ella-
—¿Por qué nos mirarán así? -pregunto el-
—no encuentro la razón -respondio ella-
—tus ojos son lindos -admitio el, al parecer lo dijo sin pensar, cuando comprendió lo que dijo, se sonrojo igual que la de ojos grises-
—a-ah gracias, Robin, los tuyos también -dijo ella-
—¿Que harás el sábado? -pregunte Robin, era su oportunidad-
—no tengo nada que hacer -contesto la niña-
—¿Quieres salir conmigo el sabado al autocinema? -hablo Robin lo más rápido que pudo, la chica logro captar las palabras del chico-
—ah... Claro, me encantaría -dijo ella-
—paso por ti a las 7, Kate -respondio el-
Los chicos estaban en un mar de emociones. Solo quedaba esperar el sábado, era increíble
¿Parte dos?