III. Compañero de vuelo

Start from the beginning
                                    

-No me digas Gavira.

-Pero así te llamas- respondí obvia.

-Si, pero nadie me llama Gavira, solo Gavi- dijo.

-Bien.

El avión empezó a rodar por la pista por lo que agarré de manera inconsciente su mano, algo que lo tomó de imprevisto.

-Lo siento- me disculpé quitando mi mano de inmediato.

-No pasa nada, ¿Estás bien?

-Si, es solo que no soy muy fanática de los aviones que digamos- Era verdad, no me gusta la turbulencia de los aviones, ni que llueva cuando voy en uno, mucho menos viajar de noche.

-Tranquila- dijo sujetando mi mano nuevamente.

-Eh... ¿me devuelves mi mano?- pregunté luego de unos minutos.

-¿Qué?

-Que si me devuelves mi mano, ya estamos volando, ya no necesito que la sigas sujetando- señalé su mano entrelazada a la mía.

-Lo siento- dijo quitando su mano.

Giré mi vista a la ventana, empezaba a anochecer, así que saqué mi celular y tomé una fotografía del cielo.

Amaba los atardeceres, amaneceres, en sí, amaba el cielo, solo que no me gusta volar ¿irónico, no?

Luego de tomar la fotografía, me coloqué mis cascos y reproduje mi playlist, no sé en que momento me quedé dormida.

PABLO:

Joder algo me estaba dando al tener a esta chica junto a mí.

Empecemos por el hecho que nos conocimos de una manera algo... peculiar. Segundo, me he enterado por Pedri que es la hermana de Ferran, ¿ahora cómo se supone que salude a mi amigo fingiendo que no me lié con su hermana en un bar? Tercero, la tensión que siento en este momento es de otro mundo, no sé si solo sea yo, o todo el maldito avión, pero estoy más quieto que nada desde que me pidió quitar mi mano de la suya, no es por nada, pero siento que un movimiento en falso y voy a terminar con un ojo morado.

Estoy hablando con Pedri por mensaje de toda esta situación y el muy gilipollas se ríe, y no sólo él, a Ansu se le ha llegado a escapar una que otra risita, lo que significa que está leyendo la conversación y ya sabe este lío.

Decidí pararme para dirigirme donde el canario, el cual al verme no pudo más y soltó una carcajada que calló enseguida. 

-¿Quieres dejar de reírte, por favor?- le di una colleja.

-Perdón, pero es que... mírate- dijo y yo no entendía a qué se refería -El gran Pablo Gavi, sufriendo por una chica que ha visto dos veces en su vida- habló aguantando su risa.

-No sé de qué hablas, yo no estoy sufriendo por nadie- dije serio.

-Si claro, y yo soy blanco- dijo Ansu provocando que ambos rieran.

-Sois insoportables de verdad- sentencie y me dirigí de nuevo a mi asiento.

Lilian estaba dormida, así que con cuidado de no despertarla, me senté en mi asiento y traté de dormir.

Estaba por lograrlo, hasta que sentí un peso en mi hombro, giré mi cabeza y vi la oscura cabellera de la chica, con cuidado de no despertarla, acomodé mi cabeza sobre la suya y finalmente me  quedé dormido.

Me despertó la voz de Luis diciendo que ya estábamos aterrizando en suelo Árabe, giré mi cabeza y pude ver por la ventana que el avión ya estaba en la pista; Lilian seguía dormida en mi hombro.

-Hey, pelinegra, despierta- susurré tratando de despertarla.

-Mhm, ¿qué pasa?- dijo aún con los ojos cerrados.

-Ya aterrizamos, anda, arriba- dije moviendo un poco mi hombro para que abriera los ojos. 

Se enderezó frotándose los ojos, ¡Dios!  Aún recién levantada se veía hermosa. Esperen, ¿Qué acabó de decir?

-¿Qué miras?- dijo voltenado en mi dirección.

-Que te escurrió la baba- dije frotando mi pulgar en mi barbilla simulando limpiarme.

-¿Qué?- abrió sus ojos como platos.

-Nada, que es broma, tranquila- dije calmandola.

El resto del equipo también se estaba despertando.

Luego de unos minutos bajamos del avión y nos dirigimos por las maletas. Mientras tomaba la mía, perdí de vista a Lilian.

-¿Oye haz visto a las chicas?- pregunté a Pedri.

-Ni idea hermano- contestó tomando su maleta.

-Vamos- dijo Luis haciendo que todos empezáramos a caminar hacia la salida del aeropuerto.

Había muchas personas a la salida, esperando por nosotros, nos acercamos a autografiar y tomarnos fotos con algunos de ellos.

Luis nos señaló los autos que nos llevarían al hotel.

Me subí en el más cercano y ahí estaban ellas.

-Hola, ¿qué hacen aquí?- saludé a Sira y Lilian.

-Ahhh...venimos con ustedes y nos vamos a quedar en el mismo hotel que ustedes- respondió la pelinegra de forma obvia, por lo que rodé los ojos.

-Si, lo sé, me refiero a que en qué momento llegaron al auto, las perdí de vista cuando tomé mi maleta.

-Ah si, nos venimos antes que ustedes, a Lili no le gustan los paparazzis, ni esas cosas- respondió Sira.

Estaba por decir otra cosa cuando llegaron los demás; en el auto íbamos Ferran, Ansu, Pedri, Eric, Luis, Laporte, Sira, Lilian y yo.

--------------------------------------------------------------
Tal vez ahorita vean esto como algo insignificante, pero poco a poco va a ir cobrando más sentido.

 𝐑𝐄𝐃Where stories live. Discover now