𝗠 | En donde Bang Chan es un ladrón especializado que contratan los líderes corruptos más poderosos del país y acepta un robo que cambiará su vida.
✦ Contenido +18, violencia,
lenguaje vulgar/ofensivo, sangre.
✦ Historia original de mi cabecita
✦ L...
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Eun-yeong había dejado a Chu-won a las 9 de la mañana en la biblioteca pequeña que quedaba cerca de casa. Tenía un par de deberes importantes, por lo tanto no podría acompañarla en su lectura semanal, así que la dejó a cargo de cualquier empleada que trabajase ahí.
Una muy mala elección. Puesto que Christopher se había enterado y se volvió loco ¿Cómo iba a dejar a su hija a cargo de un desconocido? Definitivamente lo saca de las casillas. Lo único que puede hacer es regañarla más no despedirla. Ella solo lo hace para estar cerca de él, así que le paga muy poco, y si contrata a alguien más obviamente es más dinero. Lo que tiene que aguantar.
Chu-won estuvo ahí durante dos horas. Christopher se bajó de su auto, caminando con rapidez y entrando al lugar, suspirando con calma al ver a su hija sentada en el suelo junto a otros niños y padres, escuchando el cuento que le leían.
— Christopher — se giró encontrando a Somin, una de sus muchas aventuras y la más persistente hasta el momento. Es recepcionista en la biblioteca, se conocieron cuando Chris vino a inscribir a su hija a las lecturas auditivas y han estado juntos un par de noches — tenía mucho sin verte ¿Cómo vas?
— Bien, a tí también se te ve de maravilla — la miró de arriba a abajo coqueto, apoyándose en la recepción, haciéndola reír — pensé que ya no trabajabas aquí, me habías dicho que ibas a renunciar por la universidad.
— ¿Eso fue hace cuánto? ¿Un mes? De hecho, no me dejaron irme. Llevo tiempo aquí y se encariñaron conmigo, me dieron la opción de hacer turnos con otra chica, algo peculiar, pero acepté. Por eso no me has visto tanto. — explica a detalle, él asiente entendiendo — ¿Qué te pasa? Te noto algo estresado.
— No es nada, el trabajo me tiene pensativo. La empresa me pone patas arriba, como siempre.
— Sabes que cuentas conmigo por si te quieres distraer — acarició su brazo con suavidad, él sonrió de acuerdo con su idea.
— ¿Tienes el viernes libre?
— ¡Papi! — Chu-won interrumpió la conversación, corriendo hacia su padre apenas lo divisó entre las personas. Él le dió su atención mientras Somin seguía con el trabajo. Por lo general, él trata de no demostrarle a su hija lo que hará o se dice con otras mujeres, prefiere mantenerla alejada de sus temas personales — papi, tengo mucha hambre ¿Qué vamos a comer?
— Mmm... ¿Quieres pollo frito? — ella asintió emocionada, es su comida favorita — anda, ve por tu mochila.
— No, papi, primero ven a conocer a la señorita miel, me lee muchos cuentos y me regala dulces. Ella me cuidó hoy cuando Eun-yeong se fue. Quiero que sepa que me iré contigo y no preocuparla — Chris rodó los ojos al recordar la tontería de la niñera.
— Está bien — aceptó sin más remedios, siendo jalado por la pequeña hacia la zona infantil que estaba al frente. Alzó las cejas al ver a Ophelia, organizando en la librería aquellos que había tomado para leer — ¿Ophelia?
