II; CARRERAS.

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[OMNISCIENTE

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[OMNISCIENTE.]

"CARRERAS."

-¿Estás segura de esto?.

-Si, lo estoy, Amy. Nunca he estado más segura que hoy. -Miró a su acompañante, quién la miró frustrada y desconfiada, entre muchas emociones más que no podrían expresar de ninguna manera, felicidad. Entraron al lugar mientras la música fuerte llegaba a sus oídos muchas chicas sexys, chicos coqueteando, cuándo no. y luego están los corredores.- Esto va a ser emocionante.

La anterior mencionada la miro por sobre el hombro y rodó sus ojos, viendo la sonrisa de la castaña quien al bajarse de su auto alguna gente empezó a saludarla, no la conocían pero su auto era fabuloso, un auto rojo con rayas negras, con un motor más rápido que la palabra rápido. Amy le sonreía a todos de manera nerviosa, mientras la castaña llevaba su mala cara a todos lados, a menos que la saluden, siempre estaba alerta a su al rededor.

-¿Nos podemos ir?. Creo que ya no quiero hacer esto.

-No, Amy. Ya no hay tiempo para arrepentirse, sabes que tenemos que terminar con esto de una buena vez por todas. -La chica rodó sus ojos harta de la insistencia de su amiga; Amarilis.- Uuh, aquí viene. Solo mira y aprende, Amy.

Le dió una sonrisa a la de rulos quien rodo los ojos con una estúpida sonrisa de diversión plasmada en su rostro, una pizca de diversión era lo que le faltaba a la castaña para ganar hoy. Dió unos pasos adelante encontrándose con un chico que tenía intenciones de ir a coquetear con ella claramente, este se apoyó en el capo de su auto observándolo, con solo una mirada podia ver hasta lo que contenía dentro.

-¿Una chica tan linda va a competir?, esta situación jamás la he visto. -Le dio una sonrisa, logrando llamar la atención de la chica, sorprendida que haya hablado primero, siempre se le habían insinuado a coquetear pero jamás habian dirigido la palabra primero.- Tu auto se ve demasido veloz.

-A veces no vemos las suficientes experiencias, bonito. -Le regaló una sonrisa ladina que dejo embobado al chico, que se habia quedado anonadado con la sonrisa tan perfecta de la castaña, ella llevo su cabello hacia atras, gesto que mataba a todos los chicos, y que les parecía más atractivo de lo normal.- Y si, mi auto es lo más apreciado que tengo en mi vida.

-¿Lo más apreciado? ¿No tienes pareja?. -Le preguntó descaradamente, la chica volteó a verlo instantaneamente, y por su cabeza pasó el único recuerdo de su último amorío, dejo pasar eso y puso sus pensamientos en el presente.-

-No, claro que no. Una diabla no necesita un diablo, puede hacer maldades por si misma. -El muchacho le dio una sonrisa, no negaba que era bastante atractivo, su sonrisa era hermosa y a la vez espeluznante, no tenía cabello, era totalmente pelado, pero le agradaba su estilo de chico malo y diferentes a los clichés. Jamás nadie fue tan cuidadoso al coquetear con ella de esa manera, siempre fueron dos palabras y luego una noche de pasión, y solo eso, luego volvía a su vida cotidiana.-

-¿Sabés?, creo que tienes razón, ¿Para qué ser el mejor corredor si no tienes a tu auto como prioridad?. -El hombre con brazos fuertes y grandote, dejó sin palabras a la castaña, dejándola con la palabra en la boca, mientras ella se quedaba mirando el suelo aturdida él se marchaba. ¿A qué se refería con ser el mejor corredor?.-

-Sam, ¿Está todo bien?. -Volteó a ver a su amiga y asintió, empezo a caminar hacia su auto y entró, cuando lo encendió y paso por al lado de su amiga le dijo solo una cosa.-

-Recuerda Amy, correr o morir. -Le guiñó el ojo y avanzó el auto hasta la pista de carrera, viendo por el espejo a su amiga reírse causando una sonrisa de medio lado, suya.-

-¡Bien chicos!, ¿¡Preparados!?. -Cada corredor hizo sonar su motor de maneras diferentes e increíbles, volteó a ver al chico con el que hace ratos había hablado, este le regaló una sonrisa de superioridad, logrando que la castaña lo ignore completamente, no sabía por qué lo ignoró, en su interior le estaba regalando una sonrisa de ego.- ¡Ahora!.

La castaña se sorprendió al ver como el hombre levantaba su auto mientras avanzaba, quedó unos centímetros mas adelante que todos, aunque segundos después su auto bajó logrando que ella avanzará y ahora quedará primera antes que todos, apretó el f...

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La castaña se sorprendió al ver como el hombre levantaba su auto mientras avanzaba, quedó unos centímetros mas adelante que todos, aunque segundos después su auto bajó logrando que ella avanzará y ahora quedará primera antes que todos, apretó el freno, movió la palanca y giró su volante hacia la izquierda, logrando dar una vuelta increíble, con una sonrisa de superioridad avanzó más, aún sin usar sus trucos.

Vió como un auto avanzó mas rápido que ella, y se rió sabiendo que acaba de usar el nitro antes del inicio del verdadero juego. Observó como otros autos hacían lo mismo que el anterior jugador, ella quedó al lado del hombre pelado, ambos se miraron a la vez con una sonrisa de superioridad. Ella no sabía por qué pero con sus miradas tan penetrantes sentía que en la carrera solo eran ellos dos, solos. Es increíble porque ambos son demasiados competitivos.

El hombre avanzó rapidamente sobrepasando a la castaña y quedando como primero en la carrera, nuevamente soltó una risota sabiendo que era demasiado pronto como para usar el nitro, aprovechó que todos ya lo usaron y encendió el nitro pasando a todos, quedó justo al lado de él. Sabiendo que iba unos centímetros mas adelante que ella, y que ya veían la meta cerca, decidió hacer un poco de esto, divertido. Chocó contra su auto logrando que pierda el control, pero se ve que es demasiado bueno, ya que en vez de revolcarse solo se atrasó un poco, recuperando su posición.

Vió por el espejo como él encendía algo en su auto, y milagrosamente la pasó por encima, pero ella hizo lo mismo, a tan solos unos pocos metros de la meta, lo sobrepasó y ganó la máldita carrera. Soltó un grito de celebración, y estacionó su auto luego de dar un par de vueltas ocasionando humo en la gente que festejaba por la ganadora. Se bajó del auto y a la primera persona que fue a abrazar fue a su amiga, con un abrazo bien fuerte.

-Acabo de encontrar a Toretto. -Le susurró en el oído a la chica, sacándole una risa divertida a la misma. Vio como los autos iban llegando y se acercó al chico pelado con camisa sin mangas y un lindo collar colgando de su cuello, se bajó con bastante estilo de su auto, mientras sonreía pesadamente- Buena carrera, bonito.

-Lo mismo digo. -Le dió una sonrisa demasiado hermosa, mientras la gente estaba aún celebrando con la música en alto, ellos dos solamente podían escucharse ya que estaban cerca del otro.- ¿Sabés?, si no me hubieras chocado yo hubiera ganado.

-¿Eso crees?. -La castaña con un nivel de ego demasiado alto, le regaló una sonrisa egocéntrica, ocasionando una risa de parte del muchacho enfrente de ella, quien levantó su mirada para verla a los ojos directamente, esta no sabía por qué pero sintió algo en su estómago que por pequeños segundos creía vomitar, su piel estaba como una gallina, y su boca se había secado en tan solo unos segundos. Observó atentamente los movimientos del hombre que se encontraba frente suya-

-Eso lo sé. -Le susurró al oído, para luego marcharse, luego de eso no lo volvió a ver en toda la noche, decepcionandola un poco, pero sacando la idea de que le atraía fisícamente, él tenía el objetivo del plan y no podía atraerle en ningún sentido.-

"Encontraré a tu hermana, Amy.
Y las pondré a salvo, lo sabés."

𝗙𝗔𝗦𝗧 𝗖𝗔𝗥𝗦 || 𝗗.𝗧𝗢𝗥𝗘𝗧𝗧𝗢Where stories live. Discover now