10. coach jude

433 50 35
                                    

capítulo diez
entrenadora jude

capítulo diezentrenadora jude

Oops! Această imagine nu respectă Ghidul de Conținut. Pentru a continua publicarea, te rugăm să înlături imaginea sau să încarci o altă imagine.

Primer grado.

Aquella mañana, Reese se había ido más temprano a la escuela. Se sentó en la misma banca de siempre y esperó unos minutos para que aquellos niños brutos llegaran a la escuela. Y cómo no, se pusieron a jugar baloncesto en el patio de juegos.

Judith no llegaba aún, así que Reese se levantó de su lugar y se acercó a la bola de monos. Se puso de pie frente al que jugaba a ser el líder, cuando el chico lo miró, hizo que detuvieran el juego.

—¿Qué quieres, Wilkerson?

—Deja que juegue.

—¿Tú? Bien, pero vas con ellos, no son muy buenos.

—No hablo de mí.

—¿Entonces de quién?

—De Judith. Déjala que juegue.

—¿La niña que tiene cabello de bruja? Ni de broma.

—Te dije: déjala que juegue, ¿no entiendes? —repitió Reese —¿O quieres que mi hermano te lo explique?

—Tu hermano no me asusta, Wilkerson —claro que lo asustaba, Reese lo sabía —. De todos modos, ¿en qué te afecta a ti que la niña rara no juegue con nosostros?

—Ella no es rara —Reese intentó no levantar la voz, pero le fue imposible, empezaba a enojarse.

El bruto que tenía enfrente sonrió burlón.

—Ah, ya entiendo... Te gusta la niña rara, ¿verdad?

—Eso no tiene nada que ver.

—Pero te gusta —volvió a afirmar el niño estúpido.

Reese apartó la mirada, pero sus mejillas ya se habían sonrojado ligeramente. Todo esa actitud de rudo que Francis le enseñó a tener se había ido por el caño.

—Está bien, Wilkerson, la dejaré jugar —dijo el cerebro de mono —. Pero tienes que hacer algo para que eso suceda.

Reese tuvo un mal presentimiento. Pero sabía que haría cualquier cosa para ver a Judith feliz.

—¿Qué tengo que hacer?

Esperaba no llegar a arrepentirse de lo que tuviera que hacer.









𝗷𝘂𝗱𝗲 𝘁𝗵𝗲 𝗼𝗹𝗱𝗲𝗿, reese wilkersonUnde poveștirile trăiesc. Descoperă acum