• Looking into his eyes, I think he is already hurt •
| Charlotte Riley, hija de dos sobrevivientes de la masacre de Woodsboro de 1996.
Charlotte luego del divorcio de sus padres se quedó en Woodsboro a vivir con su padre. Pero no sabe que pudo ser...
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Charlotte se encontraba junto a Ethan, se tada en las piernas de este, mientras el dejaba suaves besos en los hombros o en el cuello de la chica.
-Estoy orgullo de ti, lo hiciste genial, nena.- Hablo él. -Matar a Henry y luego a la loca terapeuta. -Ella solo sonrió ligeramente. -¿Lo disfrutaste?
Charlotte no respondió, pero dejo que el siga besándola.
-Eres hermosa y perfecta, soy tan afortunado de tenerte.- Hablo Ethan besándola y empezando a morderla ligeramente, haciendo que ella suelte suaves gemidos.
Charlotte sonrió por todos los elogios que su novio le estaba dando.
Las caricias y elogios empezaron a crecer desde que Ethan convenció a Charlotte de realizar sus fantasías asesinas. Solo que la chica estaba demasiado enamorada para notar que estaba siendo manipulada.
-Tengo otro trabajo para ti.- Hablo Ethan y Charlotte se separó rápidamente de él, un tanto asustada y confundida. -Este será el último, lo juro.
-Eso dijiste la otra vez.- Hablo Charlotte mientras se sentaba junto a él y cruzaba los brazos. -Ya no lo haré más.
Ethan la miró dulcemente. -Por favor, nena, te prometo que sera la última vez.
-E...- Hablo ella no queriendo volver a hacerlo.
Pero luego de un rato suspiro cediendo al plan.
-Necesito que mates a Anne.- Hablo Ethan y Charlotte lo miro aterrada.
-No haré eso.- Hablo ella rápidamente. -No puedo matarla, ella no me hizo nada.
-Por favor, ella es la única que nos impide estar juntos. Además no es necesario que la mates, sólo mantenla alejada para que no pueda buscarme.
Charlotte suspiro, no segura sobre esa idea y asintió.
[...]
En la noche, Charlotte se encontraba disfrazada fuera del hospital, esperando a que Anne salga para asustarla pero no atacarla.
Charlotte se encontraba parada junto al auto de Anne, esperándola.
El corazón de Charlotte latía tan fuerte que parecía que estaba por salir de su pecho, pocos segundos después vio a Anne salir del hospital.
La mujer estaba hablando ansiosa por teléfono, pero al ver la figura enmascarada soltó un gritó, y soltó el teléfono, sin haber cordado la llamada, el teléfono cayó al suelo.
-¡Déjame en paz!- Gritó Anne asustada.
Charlotte sintió su corazón romperse ante esta escena. Pero el plan debía seguir.
-Por favor déjame, no me hagas daño, tengo un bebé, un hijo, tengo familia, no puedo dejarlos.- Hablo la mujer sollozando, y Charlotte sintió como una lágrima recorrió su mejilla.
