Una chica de 16 años de edad que comienza su nueva vida en Monterrey junto a su mejor amigo de la escuela Alexis (Quackity), ella es hermana de el famoso Juan Guarnizo.
Su mejor amigo y ella poco a poco se dan cuenta que se aman, pero abra varios ob...
Al llegar ví su silueta a la orilla del mar, parecía estar observándolo. Camine con cuidado de que no se me metieran la arena en los zapatos.
Al llegar me puse a su lado, sin decir nada. El volteo y me vió; Traía sus lentes de sol y un gorro como los que siempre llevaba.
Nos quedamos viendo en silencio, unos minutos escuchando las olas del mar.
___—Alex...-intento hablar-
Alex—Shhh...tu solo...déjate confiar...-sonrio y saco una benda-
Respiré ondo y el se colocó detrás de mi para amarrarme la venda en mis ojos. Puso sus manos en mis hombros, no podía ver nada y me susurro al oído.
Alex—Te guíare...
"Confío en el..."
El me daba unos pequeños impulsos hacia alfrente para llevarme caminada hacia algo o un lugar. No tenía miedo, solo sentía sus manos sobre mi, escuchaba la orilla del mar y sentía la arena por mis zapatos.
Alex—Llegamos...cuenta hasta tres y te puedes quitar la venda -susurro a mi oreja-
Eso siempre me daba escalofríos de su parte.
Conté hasta tres en voz alta y luego con cuidado y todavía sus manos sobre mi hombros me quite las vendas.
"No puede ser..."
Había como un especie de picnic, con algunas velas, (tu comida favorita), panecillos, una cámara de fotos, unos tulipanes, fresas y vino en copa. El color que ahora era naranja, amarillo y una especie de lila por el cielo alumbraba con las velas el lugar.
"Es simplemente perfecto"
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(Foto de referencia, pero falta el cielo :( )
Sonreí al ver tal belleza al frente de mi y volteo mi cabeza para ver la de Alex.
El sonreía y se quitó los lentes de sol para dejarlos en la manta dónde estaba todo.
____—Esto...yo...que lindo...pero...no-no tenías -me quitó el habla poniendo uno de sus dedos en mis labios-
Alex—Feliz cumpleaños...-dijo finalmente-
Sonreí y lo abrace fuertemente. Definitivamente es perfecto.
Ambos nos sentamos y vimos el amanecer juntos, comiendo, hablando, tomando y riendo.
Veo mi teléfono y me llega un mensaje de Ari de que había visto la nota y me quedé más tranquila con eso.
