Uno no decide de quien enamorarse | L.h.

Capitulo 16

Chelsea's POV.

El domingo me despierto y al abrir la ventana oigo la cremallera de la maleta de Jake. Salgo de mi habitación y voy directamente a la suya, viéndole cerrando la maleta.

-¿Que hora es? ¿A qué hora te vas?- digo.

-Son las ocho y me voy a la una del mediodía, pero tengo que estar allí a las doce.- dice y bajo la mirada mientras asiento.

-Te voy a echar de menos...- digo y los ojos se me llenan de lagrimas.

-Y yo Chelsea, te quiero mucho pequeña.- dice y corro a abrazarle.

Llegan las diez y me visto con unos pantalones azules oscuros y una camiseta negra sin mangas. Me meto en el coche de mi madre y veo pasar los árboles hasta que llegamos al aeropuerto.

Salgo del coche y voy hasta las sillas mientras mi hermano y mi madre facturan las maletas.

-El vuelvo hacia Roma sale en un- hora.- dice una voz femenina por los megáfonos y bajo la mirada.

De repente mi hermano y mi madre vienen conmigo y me quedo mirando al suelo todo el tiempo. Al oír las voces de mi hermano y mi madre despidiéndose miro el reloj y veo que queda un cuarto de hora para que salga el vuelo y me levanto.

-Te voy a echar de menos Chelsea.- dice Jake y le abrazo, llorando.

-Y yo también...- digo y le abrazo mas fuerte.

-Tiene que pasar ya.- dice el hombre de seguridad bordemente.

-Te quiero Chelsea.- me dice Jake y me abraza fuerte.

-Y yo a ti.- digo y veo que Jake saca una cajita y una sobre del bolsillo.

-La caja puedes abrirla en casa pero la carta solo puedes abrirla cuando estés muy triste.- dice y sonrío un poco.

-¿Como ahora?- digo y Jake sonríe un poco.

-Ya me entiendes.- dice y asiento.

Veo como Jake pasa los escáneres y como se gira para despedirse de mi con la mano.

-Te quiero.- gesticula con la boca y lloro mas fuerte.

Tras estar diez minutos esperando veo como el avión despega y las lagrimas siguen cayendo de mis ojos.

-Chelsea, tenemos que irnos.- dice mi madre y asiento.

Paso por al lado del guardia de antes y me mira mal. No pienso callarme.

-Ah, usted.- digo y el guardia me mira confundido.

-¿Yo?- dice y asiento.

-Si, tu. Quiero que sepas una cosa. ¡Eres un completo gilipollas!- digo y veo como mi madre me coge del brazo.

-Chelsea por favor...- dice pero me suelto.

-¿Me estoy despidiendo de mi hermano y tienes que tocarme los cojones?- digo y mi madre tira de mi haciendo que la siga.

Entro en el coche y veo que mi madre me mira mal.

-De que vas Chelsea.- dice y pongo los ojos en blanco.

Sermón en 3,2,1...

-No puedes hablarle así al guardia.- dice y le miro mal.

-No me digas lo que no puedo hacer.- dice y arranca el coche.

-Ya hablaremos en casa.- dice y negó con la cabeza.

-Déjame aquí, no quiero ir a casa ahora.- digo y ni madre frena.