🥀𝕮𝖆𝖕. 4) 𝙿𝚊𝚜𝚊𝚍𝚘, 𝙷𝚞𝚛𝚊𝚌á𝚗 & 𝙰𝚛𝚍𝚘𝚛🥀

10 0 0
                                    

🥀🥀
Tᴀɴ ғʀíᴀ ǫᴜᴇ ǫᴜᴇᴍᴀʙᴀ
ʏ ᴛᴀɴ ʀᴏᴛᴀ ǫᴜᴇ ᴄᴏʀᴛᴀʙᴀ.
🥀

Y es que el pasado por más que lo disfraces, nunca dejará de atormentar.
Una vida llena de amor y momentos dulces no es suficiente para sellar las grietas que ha dejado el huracán en un corazón.

Aria, Alec y Emery observan a Leah.

—Mi padre falleció cuando yo apenas tenía un año y mi madre nos abandonó unos meses después. Ante el mundo, Evan puede resultar un hombre muy cruel ahora, pero se hizo cargo de mí y de Priscila. Él no tuvo la misma adolescencia que el resto de chicos. Diecisiete años más tarde, Daniela, nuestra madre, volvió a nuestras vidas y yo cometí el error de creer en ella, lo que casi acabó con nuestra pequeña familia, desconfié de Evan y Daniela me utilizó para obligar a Priscila a revelar su sexualidad, en aquél entonces no sabíamos que le gustaban las chicas —una repentina punzada de dolor en el pecho le provocó escalofríos por todo el cuerpo a Aria. Priscila nunca había contado su pasado y ni Dean ni ella habían preguntado nada al respecto. Escuchar una pequeña parte de ese pasado le brindaba una oportunidad de conocer mejor a su madre, pero saberlo de aquella manera (cuando ambas estaban tan lejos la una de la otra), sólo le ocasionaba dolor y tristeza. Dicen que la verdad destruye más de lo que construye y estaba descubriendo que era cierto; el relato sobre la vida de su madre no le agradaba en absoluto —. Aún recuerdo el dolor en su rostro cuando le di la espalda; estaba tan sorprendida que no pensé en ella, sólo pensaba en que mi propia hermana me había ocultado algo muy importante y la dejé ahogarse sola. Para mí fue horrible obligar a alguien a confesar un secreto que no me correspondía, así que cuando supe lo que habías hecho, me quedé callada; sabía que tarde o temprano lo dirías, pero al menos yo no tendría que ver con eso.

—Gracias por ello.

—Dijo que al principio apoyaría a sus hermanos en esto, —los ojos pardos de Alec observaron confundidos a Leah —pero está de nuestro lado, ¿puedo preguntar por qué?.

—En mi casa hay una regla muy importante... "Nada de secretos". Para Harry y para mí siempre ha sido importante no perder la comunicación con nuestros hijos, por lo tanto, sé lo que Claire y Aria hicieron por mi hija cuando tenía cinco años. —El recuerdo de una niña llorando en la calle porque un hombre la había seguido desde la escuela hasta un callejón para acosarla le retumba en la memoria a Aria; en ese entonces Emery era una niña muy pequeña como para defenderse y para Claire y Aria, verla llorar por no poder detener al culpable de su miedo, fue suficiente motivo como para decidir acorralarlo, golpearlo (aunque no tan fuerte como les hubiera gustado debido a su corta edad, pero al menos lo necesario) y conseguir que lo encerraran en la cárcel —Ella nos habló de eso cinco años después, ¿ustedes tienen la menor idea de lo horrible que es descubrir que por más que lo has intentado, no pudiste proteger a tu hija cuando más lo necesitó?.

—Mamá.

Emery abrazó a Leah y Aria no pudo evitar sentir pena por la mujer.

—Desde entonces Harry y yo prometimos siempre cuidarlos y apoyarlos, tanto a Emery como a Ian. Amo a mis hermanos, pero que Evan se atreviera a utilizar esa manera tan baja para hacer que Emery te diera la espalda, eso si que no...

—¿Qué manera?.

Los verdes ojos de Emery la observaron y el corazón le dolió al ver aquella expresión que ella misma había visto en su rostro frente al espejo... Como si todo en ella se destrozara y ardiera de dolor.

El Delirio De Los Sueños... © [Libro #1/ Secuela Locura]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora